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Donald Trump y la Doctrina del Destino Manifiesto

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“La libertad no puede ser fecunda para los pueblos
que tienen la frente manchada de sangre.”
José Martí (1853 – 1895)
 
Donald John Trump (Queens, New York, 14 de Junio de 1946), el multimillonario y político republicano, que se presenta en los actuales momentos como pre-candidato presidencial para las elecciones de noviembre del 2016, ha hecho pronunciamientos tan descabellados que han escandalizado no sólo a la opinión pública norteamericana, sino al mundo, y en especial a los latinos.
El más reciente de ellos, ayer, aviva más el fuego y quema en las entrañas mismas de los pueblos de Latinoamérica, la que un gigante como José Martí llamó Nuestra América.
 
En sus declaraciones recientes a un grupo de inversores, el ultraderechista republicano Trump dijo, que nuestros hermanos puertorriqueños, es decir, los hijos de Betances, Hostos, Baldorioti de Castro, Oscar López Rivera y otros grandes hombres de ese noble pueblo – que ha visto morir a muchos de sus hijos en las guerras defendiendo a los Estados Unidos -, “No son parte de la raza americana”, y, que por tanto él le retiraría la ciudadanía norteamericana en caso de llegar a la presidencia, esa que le impusieron a ellos en 1917, vale decir casi 20 años después de que los norteamericanos ocuparan militarmente a Puerto Rico, mediante la llamada Ley Jones.
 
Más allá de sus burdas declaraciones contra los puertorriqueños, el republicano Trump la ha emprendido en contra de los mexicanos (pero también contra los peruanos), a cuyas autoridades acusó de enviar a Norteamérica a “criminales” y “violadores”, y para los cuales, como forma de detener su entrada a territorio estadounidense, dijo que levantaría un muro en sus fronteras y que el mismo sería pagado de los bolsillos de los mexicanos.
 
A Trump de seguro que, por desconocer la historia de su pueblo, se le ha olvidado que entre 1846 – 1848 los norteamericanos les arrebataron a México, en una guerra injusta, infame, cruel e inhumana más de la mitad de su territorio: California, Nuevo México, Arizona, Utah, Nevada, Colorado, y partes de Wyoming, Kansas y Oklahoma. Pero antes, ya le habían arrebatado a Texas (1840). Esta guerra, que muchos norteamericanos con conciencia critican todavía, finalizó como es sabido, con el Tratado Guadalupe Hidalgo de 1848. México perdía así 2 millones 100 mil kilómetros cuadrados de su territorio de entonces (el 55%).
 
Las descabelladas declaraciones de Trump reviven más aún, una doctrina filosófica norteamericana puesta en marcha desde 1845 llamada el Destino Manifiesto, y uno de cuyos más altos exponentes fue el décimo quinto presidente norteamericano James Buchanan (1791 – 1861). Y, anteriormente a él, el presidente James Knox Polk (1795 – 1849), quien impuso la guerra a México durante su administración.
 
La doctrina del Destino Manifiesto, expresa en pocas palabras, que la nación norteamericana, es un pueblo “elegido por Dios”, y que por tanto es “superior al resto del mundo”. Y, que puede expandirse según le convenga a los cuatro vientos por todo el planeta. Pero, además, postula que la raza blanca, una parte de la que con uñas y dientes defiende Trump, es la raza superior, y a la que la demás razas deben obedecer sumisamente.
 
Sin dudas, Trump hoy día está en el centro del debate de la opinión pública norteamericana: pero, ¡a qué precio! Son 54.1 millones de latinos los que hoy en Norteamérica rechazan con furor y rabia a Donald Trump.
 
América Latina que hoy día busca su camino de paz, progreso y felicidad y de la que tantos y tantas de sus hijos e hijas por las injusticias, la falta de oportunidades y el robo descarado de muchos de sus gobernantes ha forzado a exiliarse económicamente en Norteamérica ve a Donald Trump como un halcón agresivo y peligroso, a quien sin dudas, le falta juicio y tino para dirigir ese gran pueblo: el de Washington, Lincoln, Martin Luther King Jr…y que hoy de forma laboriosa Barack Obama trata de unir en sus diversidades.
 
Bien lo dijo Martí a todos sus hermanos latinoamericanos: “Vale más un minuto de pie que una vida de rodillas”
 
¡Unidos, jamás seremos vencidos!
Agosto 25, 2015
Perth Amboy, NJ
 
El autor es escritor e historiador dominicano.
Email: jmendezjiminian@gmail.com
 
 
Jesús Méndez Jiminián
 
Donald Trump

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