El agroempresario Ángel Rondón Rijo planteó al Gobierno emprender, a través del Ministerio de Agricultura, un programa orientado a incentivar a la población dominicana el consumo de productos lácteos de producción nacional.
Durante un encuentro nacional de líderes agropecuarios, el empresario explicó que existe una competencia desigual entre esos productos y los importados, “por la errada creencia de parte de la población de que la calidad de los rubros extranjeros son superiores en calidad que los dominicanos”.
En la actividad, el ministro de Agricultura, Ángel Estévez, exhortó a la población dominicana a consumir los productos lácteos que se producen en el país, destacando que muchos son superiores a los importados.
El funcionario refirió, que un experto quesero italiano le comentó, que la materia prima láctea de la República Dominicana es esencialmente orgánica, porque la mayoría de las vacas se alimentan de pastos sin fertilización, ni pesticidas, ni químicos elaborados.
Destacó que al consumir productos nacionales el dominicano respalda al productor nacional, lo que le permitiría ser más eficiente y competitivo.
En el encuentro efectuado en la hacienda Los Ángeles, de San Pedro de Macorís, auspiciado por la Junta Agroempresarial Dominicana (JAD), participaron, además, del ministro de Agricultura y del agroempresario Rondón, el administrador general del Banco Agrícola, Carlos Segura Foster, Ricardo Baceló, presidente de la Asociación Dominicana de Hacendados y Agricultores.
También, el presidente del Patronato Nacional de Ganaderos, doctor Marcelino Vargas , el presidente de la Asociación de Ganaderos del Este, Ulises De Beras, el director del Instituto Agrario Dominicano, Emilio Toribio Olivo, el director del Fondo Especial para el Desarrollo Agropecuario (FEDA) Antonio López y otros invitados.
Durante su intervención, Rondón dijo confiar en que el Gobierno se empoderará de la iniciativa y lanzará una campaña para lograr que los consumidores dominicanos, los propietarios de hoteles y supermercados incentiven el consumo de artículos alimenticios que se producen en República Dominicana como una manera de no solo respaldar a los productores locales como una forma de contribuir al desarrollo del país.
