Naciones Unidas.- La crisis de migrantes que afecta a países del sur de Europa llega con fuerza a la zona occidental de los Balcanes, donde se multiplicaron las personas en tránsito y los solicitantes de asilo, señaló hoy Naciones Unidas.
Según la agencia a cargo de los refugiados (Unhcr), la región experimenta un dramático incremento en la cifra de hombres, mujeres y niños que utilizan la llamada ruta de los Balcanes occidentales, donde muchos piden quedarse.
Solo Serbia recibió en los primeros cuatro meses de este año más de 22 mil solicitudes de asilo, precisó el vocero de la oficina, Adrian Edwards.
El portavoz señaló a la prensa en Ginebra que la mayoría de los migrantes y refugiados proceden de países azotados por conflictos armados y crisis humanitarias, como Siria, Afganistán, Iraq, Eritrea y Somalia.
Las personas toman un largo viaje desde sus lugares de origen, que incluye el paso por montañas, periplo marcado por el riesgo de accidentes y de sufrir abusos y violencia, dijo.
La ruta de los Balcanes occidentales para llegar a Europa parece complementar el empleo del mar Mediterráneo como vía de acceder al viejo continente, en aras de escapar de los conflictos y la pobreza en naciones de Asia y África.
De acuerdo con la Unhcr hasta el 8 de junio 103 mil migrantes y refugiados arribaron a Europa, gran parte de ellos a Italia y Grecia. El tema del Mediterráneo y la muerte por ahogamiento e hipotermia de cientos de seres humanos desató hace dos meses fuertes críticas a la Unión Europea, por las insuficientes acciones de búsqueda y rescate en la zona.
Aunque el bloque comunitario activó medidas y desembolsó recursos para lidiar con el problema, su marcada visión en el asunto de la seguridad y el combate a los contrabandistas sigue generando malestar, sobre todo entre quienes piden centrar la respuesta en el ser humano.
