El procurador general de Polonia, Andrzej Seremet, visitó este viernes a las familias de los niños abusados sexualmente por el exsacerdote Wojciech Gil (Alberto Gil), mientras realizaba su misión pastoral en la comunidad de Juncalito, en Santiago.
En el encuentro, Secremet estuvo acompañado del procurador dominicano, Francisco Domínguez Brito y la fiscal de Santiago, Luisa Liranzo, quien realizó las investigaciones y formal acusación en el país.
Los familiares expresaron su agradecimiento por llevar hasta el final el caso de violación contra sus hijos, y lograran que el imputado fuera apresado, procesado y finalmente condenado en Varsovia, Polonia.
Durante la visita, Andrzej Seremet expresó que el caso de los abusos cometidos por el excura Alberto Gil contra menores de edad dominicanos y polacos, tocó las fibras más sensibles de toda la sociedad de su país y que asumieron las acusaciones como si todos los afectados fueran de ese país, por lo que no escatimaron esfuerzos basados en la cooperación internacional entre las dos naciones, hasta lograr una sanción.
“Nosotros nos hemos sentido afectados con este caso porque se trata de niños inocentes que no merecían un trato tan hostil, violentando su dignidad y lastimando aspectos psicológicos que estamos muy conscientes, que no tienen cura ni solución con una condena contra el imputado ni con la indemnización económica que el Estado de Polonia a través de nuestro Ministerio Público, ha logrado”, manifestó Seremet.
En la reunión realizada a puertas cerradas y a la que también asistieron Marek Jamrogowicz, procurador general adjunto de Polonia, y el director general y la fiscal del Departamento de Cooperación Jurídica Internacional, señores Józef Gemra y Anna Wdowiarz-Pelc, respectivamente, el máximo representante del MP polaco aseguró que “leyeron muchas veces los interrogatorios practicados en República Dominicana, tanto a las víctimas como a sus familiares, lo que despertó mucho dolor entre las autoridades, pero “escucharla ahora de sus labios, resulta ser más desgarrador.
La delegación aseguró que se mantendrán observando muy de cerca todo el proceso, hasta tanto se culminen los tramites de la entrega de la indemnización económica a las partes afectadas, tarea para la cual seguirán colaborando las autoridades dominicanas, junto a los representantes legales de las víctimas en Polonia.
Alberto Gil fue condenado por un tribunal en Varsovia Polonia, a siete años de prisión, la cual está siendo cumplida en el recinto penitenciario Warszawa Biatoteka, así como al pago de una indemnización de unos 125 mil polski ztoty (pesos polacos) para ser repartidos entre los menores de edad dominicanos afectados en este caso.
De su lado, el procurador Domínguez Brito, reiteró su agradecimiento a la forma en que las autoridades de Polonia asumieron las acusaciones y representación de las víctimas dominicanas, y aseguró que sin la identificación y el esfuerzo que ellos dedicaron, así como la apertura de la colaboración internacional espontánea entre ambas naciones, no hubiera sido posible.
