La periodista Anny Duarte ha realizado junto al fotógrafo Dionny Matos una serie de trabajos que llaman la atención sobre el tema de la delincuencia juvenil, específicamente en adolescentes, niños de apenas 13 años y hasta 17 que intentan dar un nuevo vuelco a sus vidas en uno de los centros de Atención Integral para Adolescentes en Conflicto con la Ley, existentes en el país.
Las principales causas por las que estos menores sufren privación de libertad son: robo agravado, homicidio, drogas y violaciones sexuales. Y si un tema común halló este equipo de DominicanosHoy en el centro que intenta rehabilitar sus vidas fue la carencia de una familia y la necesidad imperante de amor y orientación.
Desde hace lustros los medios de comunicación exponen en sus páginas casos que destrozan la razón, sobre todo cuando se comentan atracos y crímenes cometidos por niñas y niños en el país. Hasta la fecha, políticas sancionadoras y no preventivas no han resuelto este drama que envuelve a la sociedad dominicana.
En la búsqueda de soluciones que ameritan los altos índices de violencia aparecen estos sitios donde un grupo de personas sustituye las ausencias y carencias con esfuerzo y dedicación.
En el reportaje que el lector encuentra en estas mismas páginas, los rostros y las palabras convergen en ese túnel inadmisible de la niñez en soledad y desamparo. Familia y sociedad tienen, por encima de todo, una responsabilidad inequívoca. Las realidades de quienes intentan hallar una luz que les muestre por dónde y cómo seguir adelante atañe a todos y todas. La pregunta sigue siendo, cómo hacer que crezca fértil la siembra de hombres y mujeres del mañana.
