El jefe del bloque parlamentario libanés Lealtad a la Resistencia, Mohammed Raad, tachó de genocidio los ataques de la coalición liderada por Arabia Saudita contra Yemen, y consideró una cobardía callar hoy ante tales acciones.
«Llamamos a (Saad) Hariri y todos sus asesores a escuchar a sus conciencias y revisar sus políticas, especialmente cuando parece que la llamada operación Tormenta Decisiva encabezada por los sauditas está logrando un fin letal», afirmó el diputado afín al movimiento Hizbulah (Partido de Dios).
Raad respondió con contundencia al pronunciamiento de Hariri, líder del movimiento Mustaqbal (Futuro), en respaldo al reino wahabita y subrayó que «sólo ignorantes y cobardes permanecen callados respecto al genocidio de Arabia Saudita en Yemen».
La escalada de bombardeos de la alianza de 10 naciones árabes contra el movimiento insurgente yemenita Ansar Allah exacerbó las rivalidades de los bloques políticos de El Líbano, básicamente entre los sunnitas como Hariri, afines a Riad, y los chiitas que apoyan a sus similares de Ansar Allah.
El diputado libanés definió incluso como «gran error» del exprimer ministro vincular a Irán, aliado de Hizbulah, con los acontecimientos políticos que tienen lugar actualmente en Yemen y en este país.
«Por el contrario, deben enfocarse a evitar la destrucción de El Líbano y el estímulo de tensiones sectarias», acotó Raad al defender la importancia de la coexistencia entre las distintas sectas para hacer frente a los desafíos nacionales y de la región.
Señaló que Mustaqbal y Hizbulah han tenido siempre puntos de vista divergentes sobre hechos locales y regionales, pero ello no desalienta al Partido de Dios a continuar las sesiones de diálogo iniciadas en diciembre con su rival bajo el auspicio del presidente del parlamento, Nabih Berri.
Entendemos la delicada posición en la que está Hariri en este momento de críticas al liderazgo saudita y sus políticas idiotas, y su fracasada agresión a Yemen y su pueblo, dijo el jefe de Lealtad a la Resistencia en alusión a la dependencia política, financiera y confesional del dirigente sunnita con Riad.
Sin embargo, enfatizó que «permanecer callados respecto a crímenes contra civiles y la voluntad del pueblo yemenita sólo puede ser aceptado por esclavos, ignorantes o cobardes», remarcó.
