Hay cosas que nos suceden en la vida que no conseguimos sobrellevar porque nos resultan emocionalmente demasiado fuertes, porque son repentinas, porque son muy dolorosas, porque son cambios inesperados, etc. Estas cuestiones pueden afectarnos emocional y físicamente, sobre todo si no conseguimos superarlas.
En este artículo te explicamos cómo la terapia de las Flores de Bach nos puede ayudar en este sentido y de la manera natural, ya que se pueden tomar a cualquier edad, sin ningún riesgo de efectos secundarios o contraindicaciones. ¡Y además son económicas y fáciles de tomar!
¿Qué tipo de traumas podemos tratar?
Estos son algunos ejemplos de situaciones que podemos resolver con la ayuda de las Flores de Bach:
Fallecimientos, pérdidas y duelos pendientes
Accidentes
Separaciones
Enfermedades
Infancias problemáticas
Shocks emocionales
Las flores de Bach permitirán ir desbloqueando el problema emocional de manera paulatina, sin cambios repentinos, para que gradualmente vayamos sintiendo más tranquilidad y vaya desapareciendo el recuerdo traumático.
¿Qué son las Flores de Bach?
Las Flores de Bach son 38 esencias florales descubiertas por el doctor inglés Edward Bach en el primer tercio del siglo XX. Estas esencias nos aportan la energía vibracional positiva de las plantas, de manera que nos ayudan a combatir progresiva y naturalmente los desequilibrios emocionales que sufrimos.
Presentan las siguientes ventajas:
Se pueden tomar el tiempo que haga falta, sin descanso
No generan dependencia
Cuando ya han hecho su efecto se pueden dejar de tomar sin riesgo
Se pueden tomar a cualquier edad, incluso a bebés y embarazadas, pero teniendo en cuenta que al ser esencias, son soluciones alcohólicas, aunque la cantidad es mínima debido a la baja dosificación que requieren.
Se pueden tomar por varios miembros de la familia a la vez
Las pueden tomar nuestras mascotas
No tienen ningún efecto secundario
No tienen ninguna contraindicación
Son fáciles de tomar
Son económicas
¿Qué flores debemos tomar?
Como hemos dicho hay 38 Flores de Bach, pero para los casos de traumas antiguos tomaremos una mezcla de las siguientes esencias:
Impatiens: aporta serenidad, minimiza la ansiedad y las ansias en general
Rock Rose: nos ayuda a tratar las situaciones que nos generan pánico, aunque no lo exterioricemos. A veces lo somatizamos en forma de pesadillas o ataques de ansiedad.
Clematis: como dice la expresión, nos pone los pies en la tierra. No aleja del aislamiento negativo, de la ensoñación, de la abstracción.
Cherry Plum: nos ayuda a tomar el control de las situaciones, de nosotros mismos, y reduce el temor que tenemos cuando estamos en un momento difícil de perder el control sobre nosotros mismos.
Star of Behetlem: es la flor para los traumas, los bloqueos, todo lo que se enquista y no deja que fluya lo positivo.
Walnut: nos ayuda a adaptarnos al cambio y a aceptar nuevas situaciones. También nos protege de influencias negativas externas.
Sweet Chestnut: combate la angustia y la desesperación, en esos momentos en los que sentimos que no podemos soportar más una situación.
Honeysucke: esta flor nos ayuda a romper con el pasado y mirar al presente y al futuro. Es imprescindible para este tratamiento.
Las cinco primeras flores las encontramos ya preparadas en un remedio conocido como Rescate, que como su nombre indica, nos rescata de situaciones difíciles o de emergencia. En cambio, de las siguientes tres esencias (Walnut, Sweet Chestnut y Honeysuckle) podremos incorporarlas o no al preparado según nuestro caso.
