El Papa Francisco dijo que la violencia y la destrucción en Irak ofende a Dios y a la humanidad y realizó una oración en silencio por las víctimas del conflicto durante su discurso semanal en Roma.
«Hemos quedado incrédulos y consternados por las noticias que llegan desde Irak», dijo el pontífice nacido en Argentina, dos días después de que Estados Unidos inició ataques aéreos para detener a un grupo insurgente que amenaza con dividir al país.
«Miles de personas, entre ellos muchos cristianos, han sido expulsados brutalmente desde sus hogares, niños que mueren de hambre y sed mientras huyen, mujeres secuestradas, gente masacrada, violencia de todo tipo, destrucción en todas partes (…) Todo esto ofende profundamente a Dios y ofende profundamente a la humanidad», sostuvo.
La multitud en la Plaza San Pedro calló después de que el Santo Padre, quien ha estado enviando solicitudes de oraciones por la gente de Irak durante los últimos dos días a través de la red social Twitter, interrumpió su discurso preparado para pedir un momento de silencio.
El Sumo Pontífice agradeció a los voluntarios en Irak y dijo que su enviado personal, el cardenal Fernando Filoni viajaría desde Roma a Irak el lunes, «para asegurarles a esas queridas personas que estoy cerca de ellos».
El papa también dijo que un fallido cese del fuego en Gaza sólo podría agravar el conflicto entre israelíes y palestinos, y rezó por las víctimas del virus ébola y por aquellos que están trabajando por detener el brote de la enfermedad.
