Tarde o temprano aparece y suele ser considerado uno de los peores enemigos de la limpieza. ¿De qué estoy hablando? Del polvo.
Aunque combatirlo es una tarea tediosa y aburrida, puede ser prevenido, siguiendo pasos sencillos que deberás añadir a tu rutina de aseo. Para lograrlo, presta atención a los siguientes consejos, prepara los productos necesarios y ¡manos a la obra!
#6 Camas
Para evitar las suciedades en la cama, es necesario cambiar las sábanas cada semana. Luego pasa un cepillo por la superficie o una aspiradora de mano para retirar las pelusas restantes.
#5 Armarios
El polvo en el armario es prácticamente inevitable. ¡Pero combatirlo sí es posible! Para ello, humedece un paño pequeño y limpia los estantes, las partes internas de las puertas y las manijas. Si es de madera, luego coloca un poco de lustra madera para mejorar su aspecto.
#4 Muebles
Los muebles desprenden mucho polvo. Y para mantenerlos siempre limpios, es necesario asearlos con un plumero cada dos o tres días. Así se mantendrán perfectos, libres de pelusas y suciedades.
#3 Aire acondicionado
¿Quieres evitar la acumulación de polvo en el aire acondicionado? ¡Limpia sus ductos de aire! Estos suelen guardar suciedades con el paso de los días y pueden hacer que tu electrodoméstico no funcione como debería. Para evitar estos problemas, pasa una esponja húmeda sobre la superficie y listo.
#2 Cojines y alfombras
Si tus cojines y alfombras están en constante movimiento, puede que acumulen mucho polvo. Para evitar estos inconvenientes, sacude los cojines de vez en cuando y aspira las alfombras de forma regular.
#1 Techos y paredes
Con los años, la pintura puede descascararse, los ladrillos pueden ir deshaciéndose y el polvo puede acumularse en los bordes de las esquinas. Para evitar este problema, utiliza una mano de pintura anti-polvo o un sellador para paredes.
