A propósito de celebrarse este 17 de mayo el Día Mundial de la Hipertensión Arterial y con fines de orientar a la población sobre esta enfermedad, considerada la plaga silenciosa del siglo XXI, que ataca a jóvenes y viejos, sin importar clase social y sexo, DominicanosHoy conversó de manera exclusiva con el prestigioso cardiólogo y director del hospital Luis Eduardo Aybar, César Jesurum, quien ofreció consejos prácticos y sencillos acerca de cómo prevenir, detectar y controlar esta condición, causante del 34% de las consultas médicas a nivel mundial.
La hipertensión arterial se caracteriza por registrar niveles de presión sistólica sobre los 130 milímetros de mercurio y diastólica sobre 80. Un individuo con niveles por encima de esos valores es hipertenso. Además, hay variaciones de esta enfermedad, como el estadio 1, 2 y 3 e hipertensión borderline, limítrofe o fronteriza.
El cardiólogo Jesurum explica que al medir la presión arterial se observan la sistólica y la diastólica. La primera se refiere a la intensidad de la sangre cuando el corazón late al bombearla y la segunda es cuando el corazón descansa entre un latido y el siguiente. Añade que el estadio 1 es de 90 a 99; estadio 2, de 100 a 109 y el estadio 3, de 109 en adelante.
Sostiene que hay innumerables teorías que tratan de explicar las causas de esta enfermedad; sin embargo, todavía se desconoce qué la produce. No obstante, precisa que hay varios factores. Por ejemplo, puede detonar tras algún problema renal, alteración de las glándulas suprarrenales, la ingesta de anticonceptivos, sobrepeso, entre otros.
Además, la hipertensión arterial no produce síntomas. Esto la hace más compleja, ya que el paciente no tiene ningún motivo para acudir al médico. El 25% de los casos donde se detectan hipertensos es porque van a chequeos rutinarios o por otra causa médica como dolor de cabeza, palpitaciones, dificultad para respirar, dolor en el pecho o mareo.
-Entonces doctor ¿a qué edad debemos empezar a cuidarnos?
“Antes, esta enfermedad se presentaba en pacientes mayores de 35 años; pero con el cambio del estilo de vida, la facilidad para consultar al médico se ha detectado en pacientes más jóvenes, incluso de 16, 17 y 18 años, asociada a la obesidad y la vida sedentaria, factores que predisponen a padecer de hipertensión arterial. Por lo tanto, hay que estar pendientes a cualquier cambio anormal que surja para acudir rápidamente al cardiólogo.
“Esta es una de las enfermedades más democrática, pues no hace distinción de clase social, sexo, raza ni condición económica. Afecta por igual a todos”, aclara Cesar Jesurum.
-¿Puede ser hereditaria?
“Hay un componente genético, en cuanto a la predisposición del consumo de sal al pasar de una generación a otra. Pues es conocido que este grano genera afecciones de salud. Además, el hecho de ser delgado no libra al individuo de padecer esta condición, ya que hay pacientes en buen peso y con niveles de presión bastantes altos y otros obesos la mantienen normal”.
-¿Cómo se controla la hipertensión arterial?
“Existen dos tipos de tratamientos. Uno farmacológico y otro no farmacológico. El primero consiste en un arsenal de medicamentos de los cuales dispone el cardiólogo. El segundo, son modificaciones del estilo de vida. A un paciente borderline o estadio uno, se le indica una dieta balanceada durante tres o cuatro semanas para estabilizarlo. Luego se evalúa y si aún están elevados los índices, entonces se pasa a los medicamentos”.
-¿Cuáles son las recomendaciones para prevenirla?
“Modificar la rutina diaria por una más saludable, hacer ejercicios 4 o 5 veces por semana, bajar de peso, disminuir la ingesta de sal, aceite y dejar de fumar. Esto, aunado a la dieta DASH, «Dietary Approaches to Stop Hypertension», que es un plan de alimentación equilibrado que el médico de familia puede recomendar.
“La dieta DASH es baja en sal, grasas saturadas, colesterol y grasa total. Se basa en el consumo de frutas, vegetales, y productos lácteos sin grasa o con un contenido bajo. Incluye granos enteros, pescado, aves y nueces. Limita el consumo en la dieta de carne roja, dulces, azúcares añadidas y bebidas que contienen azúcar. Es rica en potasio, magnesio, calcio, proteína y fibra.
“Todo esto puede alejar la presión alta y si ya la padece, la controla y evita usar tratamiento farmacológico”, detalla el especialista.
El director del hospital Luis Eduardo Aybar César Jesurum pide a la población dominicana cuidar su corazón controlando la presión arterial a través de la prevención y una alimentación sana.
