Agentes encubiertos que realizaron una operación conjunta de Estados Unidos e Italia interceptaron cientos de kilos de cocaína escondidos en cargamentos identificados como cocos y piñas como resultado de una investigación que duró dos años.
La operación resultó en numerosos arrestos en ambos lados del Atlántico y también llevó al decomiso de heroína y marihuana.
La policía antimafia italiana dijo que la operación «Puente nuevo» tuvo como blanco una nueva ruta de tráfico de cocaína que usa el puerto de Gioia Tauro, en el sur de Italia, como puerto de llegada para la droga embarcada en Sudamérica. La rama neoyorquina de la mafia siciliana y el grupo criminal calabrés conocido como *ndragheta son los asociados en esa operación ilícita.
Autoridades de Estados Unidos e Italia buscan a 26 sospechosos, entre los que se encuentra un integrante de la familia Gambino de Nueva York, a quien las autoridades atribuyen ser el negociador de la nueva ruta de tráfico.
El puerto de carga de Gioia Tauro, localizado en Calabria, es uno de los más importantes de Europa.
