El presidente de República Dominicana, Danilo Medina, parte este domingo hacia la ciudad de Nueva York para participar en la LXVIII Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
Dentro de tres días está previsto el discurso de Medina en el foro más importante a nivel internacional, que agrupa a representantes de 193 países miembros.
La agenda del jefe de Estado en la urbe norteamericana también incluye el desarrollo de un encuentro con su homólogo de Paraguay, Horacio Cartes.
Medina intervino por primera vez en la sede de la ONU el año pasado, y ese viaje inició sus salidas al exterior como presidente tras asumir el cargo el l6 de agosto de 2012.
Entonces, el mandatario criticó los modelos que miden la pobreza teniendo en cuenta un umbral de ingreso de dos dólares diarios por persona sin valorar otros factores.
«No es posible que un país deje de recibir ayuda porque su promedio de renta nacional ha superado un umbral determinado», expresó antes de calificar el fenómeno de multidimensional.
Consideró que invertir en capital humano es el mejor camino para lograr un mayor desarrollo en un contexto donde proliferan crisis de diversos tipos.
«La economía debe estar al servicio de la población, no en sentido contrario; resulta insuficiente reducir la inequidad social solo con crecimiento económico», subrayó Medina.
Manifestó que equidad y sostenibilidad son dos caras de una misma moneda con la que debemos abonar el desarrollo humano, y abogó por ofrecer más posibilidades de empleo a los jóvenes y las mujeres.
Señaló que el crecimiento económico que no considera los límites de la naturaleza y las necesidades de las próximas generaciones conlleva el riesgo de un inminente colapso.
Reclamó que los organismos financieros internacionales asuman con mayor entusiasmo y comprensión los esfuerzos realizados para romper el círculo vicioso de la pobreza y la exclusión social.
Para eso, añadió que son imprescindibles indicadores más enriquecidos, con mayor capacidad de captar y medir la compleja dinámica del desarrollo humano.
