Según un estudio, los probióticos que contienen múltiples especies de bacterias podrían ser eficaces para las personas que tienen el síndrome del colon (o intestino) irritable (SCI).
El síndrome del colon irritable (SCI) o síndrome del intestino irritable (SII) puede ser llamado colon espástico, colitis mucosa, colitis espástica, estómago nervioso, o colon irritable. El SCI es un trastorno funcional del intestino grande o colon. En los trastornos funcionales, el colon parece normal, pero no funciona normalmente.
El SCI es bastante común y representa entre el 20% y el 50% de las visitas a los gastroenterólogos (médicos que diagnostican y tratan los problemas digestivos). Sus síntomas más frecuentes son el dolor abdominal bajo, la hinchazón asociada con una alteración de los hábitos intestinales (estreñimiento y/o diarrea) y un malestar abdominal que se alivia al defecar.
Se ha descubierto que las bacterias probióticas estimulan el sistema inmunológico del cuerpo. Pueden ayudar con varias enfermedades del estómago, como las enfermedades inflamatorias del intestino, la diarrea relacionada con los antibióticos, la colitis provocada por la toxina Clostridium difficile, la diarrea infecciosa, el síndrome del colon irritable, y las alergias. Además, se ha descubierto que los probióticos ayudan a mejorar la digestión y la absorción de proteínas, grasas, calcio y fósforo. Podrían ayudar a superar la intolerancia a la lactosa y a restaurar las bacterias saludables después de que un ciclo de terapia antibiótica haya alterado la flora gastrointestinal normal.
En este estudio, los investigadores evaluaron la efectividad de los probióticos con especies múltiples en los síntomas del SCI y los cambios resultantes en las bacterias intestinales. Se incluyeron un total de 49 personas con SCI, que fueron asignados aleatoriamente a recibir probióticos con múltiples especies (una combinación de Bifidobacterium longum, Bifidobacterium bifidum, Bifidobacterium lactis, Lactobacillus acidophilus, Lactobacillus rhamnosus y Streptococcus thermophilus) o un placebo, dos veces al día durante cuatro semanas.
El equipo de investigación analizó si el tratamiento con probióticos mejoró los síntomas del SCI, como el dolor o malestar de estomacal, la distensión abdominal, la frecuencia de evacuación intestinal y los cambios en las bacterias intestinales en el plazo de cuatro semanas.
