Aunque, en general y por norma, la posición de todos los equipos respecto al resultado de los últimos entrenamientos invernales es de cierta cautela, los hay que no tienen reparos en reconocer abiertamente que los test en Montmeló no han ido precisamente como se esperaba. Ése es el caso de Sebastian Vettel. Ayer, la última jornada en que los equipos pudieron rodar sobre el asfalto del Circuit de Catalunya, el piloto de Red Bull finalizó en una modesta octava posición tras completar 100 vueltas que, aunque suponen un buen balance respecto a las 58 que sólo pudo finalizar Mark Webber el sábado, quedan aún así bastante lejos de la media del resto (por ejemplo, Mercedes completó 248 vueltas durante el fin de semana). Para Vettel, los neumáticos han sido los culpables de que no hayan podido completar el trabajo que tenían programado para la pretemporada.
Nos hubiese encantado tener la posibilidad de trabajar más en la puesta a punto, pero los neumáticos no fueron muy consistentes… Creo que todo el mundo habrá tenido el mismo problema.
Los entrenamientos han sido buenos para nosotros en general; pero desde el punto de vista de los neumáticos, todos los equipos hemos estado atados al comportamiento de los neumáticos y a veces era tremendamente difícil analizar los cambios en la puesta a punto y encontrar una dirección porque los neumáticos siempre han complicado las cosas.
Es cierto que son muchos pilotos los que en los últimos días se han quejado de la excesiva degradación que estaban sufriendo los compuestos en el asfalto de Montmeló, lo cual estaba complicando mucho el trabajo de los equipos, tanto desde el punto de vista de las gomas (resultando imposible evaluar cuál será el comportamiento de los neumáticos durante la temporada), como desde el punto de vista del monoplaza.
Con tantos problemas, Red Bull no quiere darle importancia a los tiempos de los últimos días, que -según ha reconocido Vettel- no han sido tan buenos como esperaban. Para el alemán, los últimos cronos no son indicativos del rendimiento del RB9, ya que el equipo ha estado más centrado en entender el comportamiento del monoplaza y no en marcar tiempos.
Los dos últimos días han sido buenos en cuanto a la climatología. No hacía mucho frío. Se ha tratado de entender el monoplaza un poco más y entonces ver qué se espera en Australia. Puede ser diferente. Los tiempos por vuelta no son importantes para donde estamos ahora en la tabla.
