Los maestros dominicanos de la enseñanza pública continuarán este lunes los reclamos por el aumento de su salario, ante la reciente negativa de la ministra de Educación, Josefina Pimentel, a responder de forma satisfactoria a las exigencias.
El sábado último, la titular afirmó que el incremento solicitado del 100 por ciento de las remuneraciones no es posible ni viable económicamente, pues absorbería alrededor del 50 por ciento del alza del presupuesto de este sector.
Por primera vez y cumpliendo la ley, el gobierno dominicano destinó este año el cuatro por ciento del Producto Interno Bruto a la educación preuniversitaria: 99 mil 628 millones 120 mil pesos, equivalentes a dos mil 394 millones 906 mil 731 dólares.
Atender el pedido en el nivel que plantea el gremio magisterial pondría en peligro las acciones por las cuales ha luchado la sociedad dominicana en los últimos años, subrayó Pimentel en un documento divulgado por medios de prensa.
Significaría castigar la alimentación escolar, sacrificar la construcción de 10 mil aulas, detener la adquisición de pupitres y paralizar la contratación de nuevos maestros para la llamada tanda extendida, agregó.
De acuerdo con Pimentel, a partir del presente marzo el salario mínimo mensual que ganará un maestro con licenciatura, por cuatro horas de clase, será 15 mil 830 pesos, 389 dólares.
A finales de enero pasado, los educadores ratificaron el pedido de que su remuneración sea subida en 30 mil pesos, 734 dólares, y desde entonces se acentuaron las diferencias entre las partes.
El Ministerio de Educación ofreció antes al gremio un aumento salarial de mil 300 a cuatro mil 200 pesos al mes, de 32 a 103 dólares, y la propuesta fue rechazada.
Tales cifras no satisfacen las expectativas del sector magisterial cuando el costo de la canasta familiar crece constantemente, sin contar otras necesidades, expusieron los afectados.