La violencia juvenil que en los últimos años viene afectando al país ha tocado las puertas de la escuela República de Argentina, ubicada en la Zona Colonial de Santo Domingo, donde cada vez son más constantes las denuncias sobre acciones de agresiones entre estudiantes, que en muchos casos involucran el uso de armas blancas y de otro tipo.
El centro educativo, situado en la franja donde han ocurrido los principales acontecimientos históricos de la República Dominicana, acoge a alumnos de diferentes sectores empobrecidos de la capital: la Ciénaga, Villa Francisca, Mejoramiento Social, Villa María y San Carlos, entre otros.
Consta de una moderna infraestructura, 19 aulas, área administrativa, salón de actos, laboratorios de informática y ciencias, biblioteca, cancha, así como un mural temático en alto relieve del destacado pintor bonaero Cándido Bidó. Cuenta con una matrícula de 578 estudiantes y está dentro del plan piloto de la tanda extendida.
Motivo de la visita
Este multimedios DominicanosHoy acudió al lugar atendiendo a una denuncia, acerca de un adolescente que, supuestamente, había dado muerte a otro, lo que fue negado por profesores y vecinos del área, aunque admitieron que se registró un caso donde un escolar hirió a su compañero: “De inmediato fue llevado al hospital Padre Billini y ahí al Angelita y el caso no pasó a mayores consecuencias”.
Explicaron que los padres de los menores acudieron a la Fiscalía del Distrito Nacional y llegaron a un acuerdo; luego se reunieron con los educandos envueltos en el altercado y sus progenitores y dispusieron las sanciones disciplinarias correspondientes en ese tipo de casos.
Según estadísticas, la violencia es actualmente un componente cotidiano en nuestras vidas, manifestación que ocurre en todos los niveles sociales, económicos, culturales e institucionales, donde es ocultada, negada y silenciada principalmente por educadores, quienes al no encarar los casos, los empeoran.
Opina el director
Para el encargado del plantel, profesor Pablo Acevedo, las agresiones registradas allí son normales, igual y como ocurren en otros sitios, producto del flagelo que sacude a la sociedad dominicana: “Al tener alumnos de diversos barrios y diferentes costumbres, suceden percances; pero, nada que no se pueda solucionar.
“Realmente se están presentando situaciones que antes no aparecían, algo atribuible a problemas en el hogar; o casos que se han generado en el sector entre pandillas y que luego se reflejan allí. Los jóvenes de ahora son más agresivos y utilizan objetos cortantes, cosa que no ocurría antes, que los pleitos eran a trompadas“, precisó Acevedo.
Con el propósito de evitar esos hechos, se han organizado cada cierto tiempo operativos repentinos, a fin de despojar a los alumnos de cualquier artefacto que lleven en sus mochilas:”Las pesquisas no tienen fechas ni horas conocidas, se realizan luego de una labor de inteligencia, al notar anomalías en los salones de clases”, apunta el pedagogo, quien informa que cuando a un estudiante se le incauta un arma, la seguridad le da seguimiento mediante el departamento de orientación y psicología, donde es atendido por un personal capacitado.
Nuevas medidas
Con la finalidad de prevenir cualquier suceso, a partir del próximo año escolar aplicarán una prueba diagnóstica y exámenes sicológicos para determinar la capacidad y conducta de los escolares y aquellos que no pasen el escrutinio, no podrán ser acogidos.
Explica el director que en este periodo se dio la oportunidad de reintegrar educandos sin importar el lugar de procedencia; pero, que debido a los inconvenientes presentados, a partir del venidero serán más drásticos con la aceptación.
Hechos como los que tienen lugar en la escuela República de Argentina tienen que ser absolutamente abolidos; el país necesita centros educacionales que como formadores de valores, jueguen un papel preponderante en el desarrollo integral de niñas, niños, jóvenes y adolescentes, sin olvidar la intervención de la familia y la población, quienes también deben aportar su granito de arena.
