El Cairo.- Un manifestante murió en choques con fuerzas antimotines egipcias durante una protesta frente a una instalación alternativa al Palacio Presidencial aquí, en la secuencia de la crisis política que atraviesa este país, se supo hoy.
Medios hospitalarios dijeron que 26 personas sufrieron heridas en los violentos choques generados durante una marcha llamada del jaque mate por sus organizadores, la cual se extendió hasta bien entrada la madrugada.
Ninguna fuente ha estado en condiciones de aclarar las circunstancias en que murió la persona, cuya filiación prmanece en el anonimato.
Al mediodía del viernes, entidades islamistas afines al presidente Mohamed Morsi reunieron a miles de sus seguidores frente a la Universidad de El Cairo para demandar el cese de la violencia durante las protestas iniciadas en noviembre y que se agudizaron a fines de enero pasado.
Por su parte, los adversarios, cambiaron la convocatoria para la mansión ejecutiva del distrito de Qubba, en el este metropolitano, a la cual el mandatario ha mudado su equipo por las continuadas protestas frente al Palacio Presidencial de Ittihadiya que han aumentado en hostilidad.
Los manifestantes, en su mayoría muy jóvenes, arrojaron bombas incendiarias caseras contra los custodios de la instalación, que trataron de dispersarlos con gases lacrimógenos y balines, al igual que en semanas anteriores, en lo que se ha convertido en una suerte de tradición semanal.
La animosidad entre los seguidores del presidente y sus adversarios ha crecido de manera proporcional a la profundización de las diferencias entre ambas fuerzas, centradas en lo que los segundos consideran es la intención de islamizar la sociedad egipcia.
Todo ello en medio de un estancamiento de la crisis para la que no se vislumbra salida siquiera a plazo mediato, ya que las partes rehúsan hacer concesiones: el presidente Morsi, porque debilitaría su condición de jefe del Ejecutivo; los opositores, debido a que consideran que la situación es propicia a sus intereses.
