La tragedia ocurrida la semana pasada en Brasil, donde un incendio en una discoteca dejó un saldo fatal de casi 250 muertos, motivó a este multimedios DominicanosHoy a acudir hasta la Jefatura de los Bomberos en Santo Domingo e indagar con su incumbente si esos establecimientos de diversión cumplan con las normas establecidas para su funcionamiento en la República Dominicana.
Las discotecas y otros lugares de esparcimiento en República Dominicana deben cumplir con una serie de requisitos que garanticen le seguridad de los clientes y la ocurrencia de sucesos que puedan ocasionar las muertes de personas.
Estos sitios son regulados por la resolución 153-05, de la Sala Capitular del Ayuntamiento del Distrito Nacional, avalada por el decreto 316-06, que normaliza su funcionamiento.
El jefe del Cuerpo de Bomberos de Santo Domingo, general Oscar Guillermo García, explicó que una vez son supervisados y se determina que cumplen con todas la reglas, se entrega un certificado que debe exhibirlo en la puerta de entrada del negocio.
Como exigencias obligatorias para esos lugares de expendio de bebidas alcohólicas están: que la puerta de acceso abra hacia afuera, tener una salida de emergencia, y para la que operan en un segundo nivel en adelante es necesario disponer de una escalera de evacuación; además de extintores de fuego, cantidad que debe estar acorde con el espacio del local.
De igual forma, debe haber detectores de humo, señalizaciones y un personal que sepa manejar, tanto los equipos como la orientación para una eventual evacuación rápida de las personas que ocupan el negocio.
Para la certificación de los lugares de diversión, los bomberos cuentan con un equipo especial que lo inspecciona, a fin de comprobar si efectúan con los requisitos y medidas de seguridad establecidas. La investigación es realizada anualmente, en cuyo tiempo se rectifica si el negocio sigue cumpliendo con las pautas.
Cuando el establecimiento es nuevo, se le entrega una hoja donde le indican las adecuaciones que deben hacer, para lo cual se le concede un tiempo que depende de la cantidad de cambios a realizar. Luego de realizar las modificaciones sugeridas se procede a emitir la certificación y en caso de que no cumpla es clausurado.