Islamabad.- El director del organismo anticorrupción de Pakistán, Fasih Bokhari, presentó su renuncia al parecer para eludir el reclamo de que detenga al primer ministro Raja Pervez Ashraf por su presunta implicación en casos de corrupción.
Medios de prensa locales indicaron hoy que el titular de la Oficina Nacional de Fiscalización (NAB) elevó su dimisión al presidente Asif Ali Zardari con la presumible intención de librarse de las presiones que en aquel sentido ejerce sobre él Tribunal Supremo.
Exjefe de las fuerzas navales pakistaníes, Bokhari tuvo hace unos días un encontronazo con el presidente de la corte, Iftikhar Chaudhry, al negarse a detener a Ashraf porque según él la investigación sobre el caso estaba incompleta y solo se fundaban en declaraciones orales no válidas para procesarlo.
En la propia audiencia el director de la NAB exigió a Chaudhry «mostrar más respeto» y llamarle almirante Bokhari en vez de señor Bokhari, mientras uno de los jueces le recriminó actuar más como un defensor que como un fiscal del Gobierno.
Bokhari también ha estado en el centro de una controversia sobre la misteriosa muerte de Kamran Faisal, uno de los oficiales de la NAB que investigaba las acusaciones de corrupción contra el primer ministro y otros políticos de alto rango.
El viernes 18, Faisal apareció ahorcado en un hospedaje del gobierno federal y aunque según la autopsia había cometido suicidio, familiares y colegas exigieron una investigación porque el cuerpo presentaba señales de tortura.
El gobierno creó una comisión encabezada por un juez retirado para poner en claro los hechos, pero suspicacias sobre su actuación llevaron al Tribunal Supremo a crear un panel de tres jueces que actuará bajo su exclusiva jurisdicción.
Según analistas, el nuevo conflicto entre las autoridades civiles y judiciales está gestando una nueva crisis política en Pakistán.
El predecesor de Ashraf, Yousuf Raza Gilani, tuvo que abandonar el cargo en junio del año pasado al ser encontrado del delito de desacato por negarse a pedir a las autoridades suizas reabrir un juicio por presunto lavado de dinero cursado hace una década contra el hoy presidente Zardari.
La corrupción es uno de los males rampantes en Pakistán, al punto que una reciente investigación reveló que las dos terceras partes de los parlamentarios federales y de los ministros evadieron el pago de impuestos en el 2011.