Dajabón.- La normalidad retorna paulatinamente este viernes a Dajabón y la zona fronteriza, con la apertura nueva vez de la frontera y el montaje del mercado binacional entre Haití y la República Dominicana, que se celebra al final de la semana laboral.
La situación de los 920 haitianos que estaban sobre el paso por el puente del río Masacre y que fueron trasladados a Juana Méndez, para regularizar su situación avanza a buen ritmo, aunque se presentan algunas dificultades.
El padre Regino Martínez indicó que la comisión que viajó desde Santo Domingo trabaja en la Casa de la Juventud, en Juana Méndez, llevan a más de 500 personas identificadas y la noche de este jueves trabajaron hasta las dos de la madrugada.
«Laboraron con muchas dificultades, porque se acababa la gasolina de la planta, no había bombillos y había que buscarlos; pero, pese a las limitaciones de lugar se pudo resolver las actas de nacimientos y pasaportes de 500 personas. Hay 120 que tienen dichos documentos y se está viendo todo lo necesario para la cuestión de la visa», dijo el padre Regino.
Sostuvo que la situación en el mercado binacional de Dajabón es normal: «Se entra y sale como siempre. Hay tapones porque quieren pasar todos juntos: el bus, la patana, el motoconcho, la carretilla, la gente, todo el mundo quiere ser el primero y es la situación permanente de desorden, pero hay una circulación que vamos a llamar normal para el día de mercado».
No obstante, aclaró que para concluir con la regularización de los 920 haitianos que intentan reingresar a territorio dominicano se requieren tres pasos fundamentales.
Primero, identificar a los nacionales; segundo, ver los que tienen actas de nacimientos o pasaportes y tercero, enviarlos a Washington: «Pero si este fin de semana se termina de identificar a los nacionales haitianos, el lunes los mandan a Estados Unidos y allá duran uno o dos días para regresarlos, al final de la semana que viene ya estaría resuelto el problema».
Añadió el religioso que se está agilizando el trabajo y que se ha tomado como un asunto de Estado, por lo que muy pronto habrá una solución definitiva.
