El pasado lunes 15 de octubre este multimedios DominicanosHoy publicó donde resaltaba el verdadero propósito de las visitas de funcionarios antidrogas y de justicia de Estados Unidos a la República Dominicana: solicitar la extradición de importantes militares activos y retirados, poderosos empresarios y colaboradores de gobiernos dominicanos.
Este medio buscó opiniones entre expertos en asuntos bilaterales y encontró por qué habían venido al país la titular de Seguridad Nacional de los Estados Unidos, Janet Napolitano, y la jefa de la agencia antidroga de Estados Unidos (DEA), Michelle Leonhart, quienes se reunieron por separado con el entonces presidente Leonel Fernández.
El secretario adjunto del Departamento de Asuntos Antinarcóticos de los Estados Unidos, embajador William R. Brownfield, también llegó de repente y sostuvo un encuentro con el mandatario Danilo Medina, para, supuestamente, dar continuidad al trabajo iniciado por Napolitano y Leonhart.
Según fuentes de entero crédito, la anunciada visita de la jefa de la agencia antidroga de Estados Unidos (DEA), Michelle Leonhart, a República Dominicana, por primera vez, tuvo como objetivo fundamental exigir las extradiciones de individuos que desde gobiernos anteriores han sido protegidos.
Este miércoles se conoció la información de que el Tribunal del Distrito Sur de los Estados Unidos solicitó en extradición al exdirector de operaciones de la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD), en el período 2006-2008, general retirado Francisco Antonio Hiraldo Guerrero, a quien acusan de introducir al territorio norteamericano unos 10,000 kilos de cocaína.
Así lo informaron en rueda de prensa el procurador general de la República, Francisco Domínguez Brito y el director de la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD), general Rolando Rosado Mateo.
Domínguez Brito explicó que la acusación contra el exmilitar radica en cuatro cargos por narcotráfico, hechos ocurridos desde el año 2001 al 2009. Según las investigaciones, éste le brindaba protección al narcotraficante Quirino Ernesto Paulino Castillo, cuyo servicio lo cobraba tanto en efectivo como en especie.
“La Dirección de Operaciones de la DNCD es el segundo cargo en importancia del organismo antidrogas y este hombre (Francisco Antonio Hiraldo Guerrero), no puede haber actuado sólo, por lo que las autoridades deben señalar cuáles son sus cómplices o socios”, dijo una fuente militar a DominicanosHoy.
El propósito del arresto de Hiraldo Guerrero es extraditarlo hacia los Estados Unidos por su alegada implicación en el expediente que involucra al excapitan del Ejército Nacional, Quirino Ernesto Paulino Castillo, detenido en 2004 con 1,387 kilos de cocaína.
Hiraldo Guerrero, jefe de Operaciones durante los dos años que tuvo Rafael Radhamés Ramírez Ferreira al frente de la DNCD, fue, además, inspector general, director de la Academia, jefe en Santiago, SFM, Barahona, la Romana, jefe de la División Central, de asuntos internos, coordinador del DOIF (Destacamentos de Operativos de Inteligencia Fronteriza), entre otras posiciones importantes.
Llega a la DNCD procedente de la M d G, en junio de 1994 y sale en enero de 2008, trasladado a su institución durante la gestión del general Gilberto Delgado Valdez.
En informe reciente, EEUU ubica a República Dominicana en la lista de 22 países considerados como grandes productores de sustancias narcóticas o usados para su tránsito, en el cual incluye, además, a Afganistán, Bahamas, Belice, Bolivia, Birmania, Colombia, Costa Rica, Ecuador, El Salvador, Guatemala, Haití, Honduras, India, Jamaica, Laos, México, Nicaragua, Pakistán, Panamá, Perú y Venezuela.
La inclusión en la lista responde a “una combinación de factores geográficos, comerciales y económicos que permite el tránsito o producción de drogas”, pese a las medidas que ha asumido el Gobierno en cuestión para combatir el narcotráfico, explicó el comunicado.
