La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), pidió al procurador general de la República, Francisco Domínguez Brito, dejar sin efecto la medida que dispone la eliminación de las celdas conyugales en la cárcel de Najayo y otras del viejo modelo penitenciario.
El presidente de la entidad, Manuel María Mercedes, dijo que las relaciones conyugales no son un privilegio, sino un derecho que corresponde a todos los internos.
Sostuvo que ese derecho está contemplado en la Constitución de la República, regla mínima de Naciones Unidas, en cuanto a las personas que están privadas de su libertad.
Sustentó que en caso de que la Procuraduría y la Dirección General de Prisiones continúen con esa actitud acudirían por ante los tribunales para que le sea restituido el derecho a los internos de tener relaciones en las celdas del área de los conyugales.
