El Día Mundial del Corazón encuentra al país con un aumento de las enfermedades cardiovasculares, fruto de la obesidad, el sedentarismo y la ingesta de comida chatarra. A propósito, la Sociedad Dominicana de Cardiología instó al Ministerio de Salud Pública a someter un proyecto de ley para que se vigile el contenido de grasa saturada de las comidas rápidas, cuyo expendio crece.
La presidenta del gremio, Petronila Martínez, lamentó que de 1995 a la fecha la obesidad haya aumentado un 62%, al pasar de 16 a 26%. Las mujeres son las más afectadas, sobre todo, por la gordura visceral, o grasa acumulada en la cintura y en las caderas. La falta de ejercicio complica la situación.
Habló en la jornada por el Día Mundial Corazón en el Parque Mirador Sur, Distrito Nacional, en la que hubo actividades que incluyeron consultas gratis, un rally, el primer cardiomaratón y la Gran Caminata por un Corazón Sano. Este año la actividad fue dedicada a la salud de niños y mujeres, bajo el lema un mundo, un hogar, un corazón.
“De gran relevancia es el hallazgo de que las mujeres presentan mayor obesidad visceral que los hombres, hecho sorprendente y muy por encima de las cifras registradas en América Latina, donde es de un 24.5% en la población, en nuestro país es de un 69.4%. Está presente en un 49% en los hombre y en un 72 % de las mujeres”, indicó.
Martínez precisó que los niños son las victimas más vulnerables, ya que está demostrado que la obesidad es un mal que se inicia en la niñez y en la adolescencia. “Las madres están llamadas a vigilar la salud de sus hijos, desde antes de que se enfermen ofreciéndoles comidas sanas, preferiblemente hechas en casa”.
Al respecto, alertó a la población a que no sea víctima de los expendios de comida rápida que le ofertan de primera intención porciones grandes y extragrandes, y 2×1, y de esta manera confunden al cliente, que se inclina por ellas y cae en la glotonería.
Expresa que a medida que se acostumbra al paladar a muchas cantidades se ignora entre otras alteraciones la acción de la hormona Leptina, producida por el tejido graso y que actúa sobre el hipotálamo, avisando sobre la sensación de saciedad.
Dice que si no se hace caso el organismo se acostumbra a ingerir alimentos aun no tenga hambre, lo que trae como consecuencia el sobrepeso y la obesidad e incrementa el riesgo de males cardíacos y de diabetes.
