Penélope Cruz aterrizó en San Sebastián para llevar a la pantalla del festival Volver a nacer, una coproducción hispano- italiana dirigida por Sergio Castellito y que competirá por llevarse la Concha de Oro.
La española era una de las más esperadas en la capital vasca y una vez más desplegó todo su encanto ante la cámara y sus incondicionales seguidores, que apostados durante varias horas en las puertas del hotel María Cristina veían cumplido su sueño de ver de cerca a la actriz e incluso conseguir una fotografía o un autógrafo.
Penélope ha hecho su aparición enfundada en unos pantalones grises y una rebeca negra con un llamativo bordado floral de L’Wren Scott y unos interminables tacones Ferragamo que ayudaban a estilizar aún más su escultural figura. Se ha mostrado cercana, radiante y feliz e incluso ha llegado a detenerse para acariciar a un perrito que al igual que su amo se ha rendido ante los encantos de la actriz.
