Quito.- El presidente Rafael Correa proclamó la necesidad de reformar la infraestructura educativa pública en Ecuador para mejorar la calidad de la educación, con una unidad educativa ideal de mil estudiantes desde nivel inicial hasta bachillerato.
Durante la firma del convenio con la organización sin fines de lucro Educational Testing Service (ETS) para evaluar a los profesores de inglés del país, Correa explicó que de acuerdo con el Ministerio de Educación existen demasiadas escuelas del sistema público.
Muchas de estas escuelas, comentó, tienen un solo maestro y pocos alumnos, y estimó que el tamaño óptimo desde el punto de vista pedagógico de una unidad educativa, con educación inicial, básica y bachillerato es mil estudiantes.
«Más que eso es difícil controlar, menos que eso es ineficiente», dijo.
Al tener cerca de tres millones de estudiantes en el sistema educativo público, lo óptimo sería tener tres mil escuelas y no 16 mil como se tiene en la actualidad, pues algunas se han construido sin planificación ni orden, señaló el mandatario.
Como ejemplo citó el caso de la comunidad de Tigua, donde en una extensión de un kilometro hay tres escuelas y ninguna con más de 30 estudiantes.
«No tiene sentido esta dispersión de infraestructura educativa que cuesta tanto a nivel de calidad», dijo anunciando que se prepara un plan en este sentido y una fuerte restructuración.
Agregó que una de las grandes deudas del gobierno es la educación especial y que no se va a poder ofrecer esos servicios si tenemos 16 mil escuelas.
Por otra parte, anunció que cerca de cinco mil maestros fiscales de inglés, a partir del 28 de julio próximo, irán a un proceso de evaluación que permita conocer su real conocimiento del idioma, mediante el examen TOEFL, el más prestigioso a nivel internacional.
Correa afirmó que es hora de acabar con los engaños sociales que por años han existido en el país, entre ellos, la supuesta existencia de enseñanza del idioma inglés en el sistema educativo fiscal.
Indicó que evaluaciones preliminares demuestran que de cinco mil maestros, solo el 10 por ciento sabe hablar inglés correctamente y eso explica por qué al terminar el bachillerato los ecuatorianos tienen dificultades con el idioma para estudiar en el exterior.
