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Danilo y los funcionales actuales

LA VOZ DE LOS QUE NO LA TIENEN ||
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Para el pueblo quisqueyano la libertad es como para un muchacho montarse en una bicicleta: correr sin reglas y sin adultos.

En su vida política Danilo Medina, como si estuviese aprendiendo a montar bicicletas, adquirió la habilidad para absorber potenciales desvergüenzas y sufrir sin quejarse. Aprendió a estar triste por largos ratos y cuando la gente está triste por largos ratos, deja de ser, deja de estar en sí mismo.

Luego de las primarias peledeístas de 2008 y su dolorosa derrota, yo le aconseje, le recomendé que se sentara a hacer un completo examen mental de todo porque no sería bueno que llegara a donde quería llegar sin su mente, sin su alma, sin su paz.

Leonel asumió la Presidencia de la República en una circunstancia totalmente diferente: aprendió a controlar su fortaleza, pero nunca a ser fuerte; a tal punto que luego de estar por más de 10 años administrando el Estado, cuando le preguntaron por qué no enfrentaba la delincuencia en los cuerpos armados, con orgullo, como si se tratase de una supergenialidad, respondió: “¡porque me matarían!”.

Danilo, con las derrotas aprendió a ser fuerte, cuando asuma la Presidencia sabremos si aprendió a controlar su fortaleza. Hasta ahora todo cuanto ha hecho es usar sus energías, y las de otros, para su propio beneficio. Como presidente debe usarla para beneficiar a otros, para beneficiar a la patria, para reedificar el sueño llamado Quisqueya. ¿Está preparado para la transición? Nunca ha vivido fuera del país, nunca ha asimilado las fuerzas de otras culturas, nunca aprendió a reconocer fina comida y finos vinos y tiene serias limitaciones para comprender otras lenguas. Podemos decir que es el Taino puro que se enfrentar al corruptor invasor. Enriquillo no se dio por vencido y logró sentar en la mesa de la negociación al peligroso invasor y logró que le reconocieran sus derechos y sus libertades. ¿Podrá Danilo sentar en la mesa de la justicia al corruptor?

Ahora se esta gastando tanto dinero en convencer a Danilo de que debe mantener a los actuales funcionarios como el que se gasto en la pasada campaña electoral. Cada Ministro tiene su maquinaria bien aceitada y trabajando 24/7.

Lo que se estipula en el mundo competitivo es que cuando un funcionario, tan exitoso como los actuales, se rumora, simplemente se rumora que dejara la vida pública, cientos de empresas privadas inician una desgarradora batalla, con jugosas ofertas, para atraérselo, pues es un activo que aumentará enormemente la riqueza.

Pero resulta que aquí, al súper genio de Albizu, el gobernador de nuestro Banco Central, no lo quieren ni como paletero de la Duarte. Y no menciono a Montas, el de Economía, Toribio, el de Finanzas, Bengoa, el de Banreservas, porque si a aquel no lo quieren ni como paletero, a estos no lo quieren ni como portero de letrinas. ¿Por qué será? ¿Será que realmente los conocen y saben que su gran genialidad consiste en convertir en privados los bienes públicos?

La gran verdad, y es penoso que así sea, y es por eso su guerra sucia y desesperada para que los dejen, esa gran verdad es que al salir del gobierno la única puerta que se le abre es la de la Global, donde irán a gastaran los enormes recursos adquiridos en batallas inmorales, hablando mierda, en hablar mierda, mucha mierda.

Si Danilo, con un decreto, uno solo, no manda a todos esos genios a cuidar sus nietos, entonces nos empezará a enviar la señal de que con la Presidencia empezó a perder su fortaleza. Si inicia su administración creyendo que puede resolver problemas suprimiendo libertades, entonces sabremos que no aprendió a controlar su fortaleza. La cosa que más difícil hace la presidencia es que la mente del presidente y el cuerpo del gobierno no trabajan juntos. Administrar democracia es lo mismo que correr bicicletas: si se quiere ganar hay que empezar al paso, lento, como el Sol naciente, con firme y creciente luz.

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