Los Ángeles.- Puede parecer que los Angelinos de Los Ángeles y los Vigilantes de Texas están en lugares similares.
De hecho los dos equipos partieron como favoritos de cara a esta campaña; los Angelinos gastaron y Texas seguirá gastando.
Los dos tienen núcleos veteranos con talento joven a su alrededor. Los dos tienen sólidas rotaciones y un bullpen decente. Son los dos mejores equipos en la división Oeste de la Americana, y quien sabe, quizás sean los dos mejores equipos de la liga.
Pero a pesar de que los Angelinos recortaron la distancia con Texas, la realidad es que no están en el mismo lugar para nada.
Los Vigilantes, que han mantenido su núcleo intacto durante años, saben exactamente quienes son. Los Angelinos, que cambiaron drásticamente su plantilla, siguen averiguando su identidad.
«Todavía tenemos que evolucionar como equipo», admitió el mánager Mike Scioscia.
Texas ha estado jugando su peor pelota de la temporada últimamente, mientras que los Angelinos están pasando por mejor momento habiendo ganado ocho de nueve al llegar a esta serie. No sorprendentemente, los Angelinos ganaron la serie y se llevaron dos de tres juegos.
Pero considerando la manera en que batea Texas, los Angelinos probablemente tengan que encontrar otro cambio si quieren resistir a estos muchachos durante cuatro meses. Justo cuando parecía que los Angelinos iban a conseguir la barrida el domingo, el sexto bate de los Vigilantes, Nelson Cruz, conectó una bola 484 pies, el jonrón más largo de la temporada.
Los Angelinos todavía no están en la misma clase que los Vigilantes.
«Sus últimos tres bates probablemente puedan ser 3-4-5 en la Liga Nacional», enfatizó el abridor de los Angelinos, Dan Haren, quien tuvo que pelear para resistir cinco entradas. «No te dejan respirar».
Aún después de esta serie, que revivió la noción de una división pareja, aquí está la comparación entre ambas alineaciones: los Angelinos han anotado 206 carreras, 89 menos que Texas. Su porcentaje en base está ranqueado 12 en la Liga Americana, y Texas está primero. Han bateado 48 cuadrangulares, 28 menos que los Vigilantes.
Entonces mientras Scioscia quedó contento por haber ganado la serie, no se proclamó el nuevo rey de la división.
«En los primeros dos juegos, anotamos las suficientes carreras para entregarle el partido a nuestro bullpen», explicó Scioscia. «pero todavía tenemos que jugar en un nivel más alto para hablar del potencial de nuestro equipo. Todavía no estamos allí».
Y hasta que lleguen a esa instancia, seguirán persiguiendo a Texas.
