Ámsterdam.- Una ley holandesa que prohíbe la entrada de turistas extranjeros a cafeterías donde se fuma marihuana, entró en vigor este martes en las sureñas provincias de Limburgo, Brabante Septentrional y Zelanda.
El gobierno comenzó a implementar la normativa en esas demarcaciones porque son las de mayor cantidad de establecimientos de ese tipo y la extenderá al resto del territorio en 2013.
A partir de esta jornada, el acceso a esos locales quedará limitado a los holandeses mayores de 18 años y a extranjeros con permiso de residencia.
Las autoridades exigirán a los propietarios carnés de afiliados y los 700 centros existentes en ese Estado europeo serán considerados clubes privados con un máximo de dos mil miembros con vista a frenar el llamado turismo de la droga.
Tampoco podrán permanecer abiertos si están ubicados a una distancia menor de 350 metros de un plantel educativo.
A fines del mes pasado, un tribunal de La Haya rechazó una demanda contra la legislación presentada por 19 dueños de esos cafés en la ciudad de Maastricht (sureste), por considerarla discriminatoria y violatoria de la privacidad de los clientes.
La corte desestimó ambos argumentos, los calificó de irrelevantes y recalcó que el gobierno tiene el derecho de implementar medidas como esas con el objetivo de reducir el consumo de la droga y la delincuencia a escala nacional.
Pero los abogados defensores anunciaron que apelarán el dictamen, mientras los demandantes amenazaron con ignorar la ley porque el tribunal falló en contra de su petición.
Estos establecimientos comercializan la llamada súper marihuana, variedad transgénica que cuadruplica los efectos psicoactivos del estupefaciente y, en consecuencia, daña más al sistema nervioso central.
Diversos estudios aseguran que el componente tóxico del producto conlleva al mal de Alzheimer, provoca grandes alteraciones de la memoria a corto plazo, disminuye la capacidad de aprendizaje y concentración, produce letargo, paranoia y problemas de locomoción.
De acuerdo con datos oficiales, el 14 por ciento de los turistas extranjeros, en su mayoría españoles, italianos y estadounidenses, visitan las cafeterías de Países Bajos donde se permite fumar marihuana.
Holanda es el único estado europeo donde se autoriza legalmente la venta de la planta y sus derivados en locales con licencia.
