Los equipos de rescate han llegado de inmediato al lugar del impacto, a unos diez kilómetros del aeropuerto de la capital, y han constatado el fallecimiento de los 118 pasajeros y 9 tripulantes, así como de 11 personas que habitaban en la decena de casas sobre las que ha caído el aparato, según una fuente policial.
El siniestro ha tenido lugar a causa del mal tiempo, ha declarado una fuente de la Autoridad Civil de Aviación (CAA), que ha añadido que el avión, un Boeing 737, se había estrellado en la zona residencial de Hussainabad. «La fuerte lluvia que caía en Islamabad esta tarde provocó la catástrofe», ha precisado esta fuente.
Fuselaje envuelto en llamas
Tras el impacto se ha iniciado un fuerte incendio y el fuselaje ha quedado desperdigado y envuelto en llamas, lo cual dificulta las labores de rescate y de recuperación de los cadáveres. Los pocos cuerpos que han podido ser extraídos del lugar han sido trasladados a dos centros sanitarios de Islamabad, que tras conocerse el accidente se han visto abarrotados por centenares de familiares de las víctimas.
Un portavoz de la CAA, Pervez George, ha declarado a los medios que las autoridades han realizado las gestiones necesarias para que los parientes de los fallecidos puedan alojarse en un hotel de la capital.
El área en la que se ha estrellado el avión se halla muy cercana a la base aérea militar de Chaklala, contigua al aeropuerto civil de la capital.
Un responsable aeroportuario ha declarado al diario local Express Tribune que el tráfico aéreo fue cerrado en Islamabad tras el accidente y que seis vuelos tuvieron que ser desviados a la ciudad de Lahore, a unos 300 kilómetros de la capital paquistaní.
Un rayo, posible causa del accidente
Según diversas fuentes, un motor del aparato se incendió poco antes del aterrizaje, y un experto en aviación citado por la cadena local Geo aludió a un rayo como posible desencadenante de la catástrofe. La CAA ha declarado que la torre de control perdió contacto con el avión siniestrado diez minutos antes de la hora prevista de aterrizaje.
El aparato siniestrado cubría el vuelo inaugural de la ruta Karachi a Islamabad de la compañía Bhoja, una operadora local que había reanudado sus operaciones en el 2010 tras cinco años de cierre por problemas financieros, según medios locales.
