El presidente del Puerto de Barcelona, Sixte Cambra, consideró posible un crecimiento con nuevas terminales de cruceros, así como hacer variaciones en el actual sistema de servicios, debido a que la infraestructura local podría saturarse por el incremento del tráfico de embarcaciones de ocio.
En tal sentido, el directivo aseguró que la entidad analiza modelos propicios, mientras se inician estudios para la construcción de la Terminal E, un proyecto ya aprobado.
El funcionario añadió que el flujo de navíos en enero y febrero de este año creció con relación a igual período de 2011, año en que los 881 barcos que llegaron al puerto desembarcaron a 2,6 millones de personas, un aumento del 13% respecto a 2010.
Este cálculo no incluye las embarcaciones operadas por la naviera Costa Cruceros, que en los últimos meses se vio afectada por los accidentes de dos de sus naves.
Además, Cambra se refirió al proyecto Marina Port Vell, un puerto de lujo para yates de hasta 180 metros impulsado por un grupo inglés, cuya inversión se prevé en 32 millones de euros.
La acción es considerada “positiva” por el directivo, a falta de completar el estudio sobre si el inversor cumple los requisitos técnicos y con las características de la concesión. De darse el visto bueno, el Puerto tendrá que hacer una propuesta de revisión del plan especial al Ayuntamiento local.
Cambra descartó novedades, por el momento, en cuanto a los accesos definitivos y provisionales al atracadero barcelonés.
El funcionario expresó su preocupación sobre la capacidad de acogida de cruceros de este puerto líder en España, durante la rueda de prensa de presentación de los resultados de 2011 de la Autoridad Portuaria de Barcelona (APB).
Estudian en Barcelona posibilidades de nuevas terminales para cruceros
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