Pese a los esfuerzos realizados por las instituciones de socorro, militares, policiales, de salud, tránsito y los medios de comunicación para impedir que sucedan hechos lamentables durante el asueto de Semana Santa, las estadísticas indican que los casos de víctimas mortales y afectadas han aumentado a través del tiempo.
Alrededor de 210 personas han perecido por accidentes de tránsito, ahogamiento, intoxicación alcohólica y alimenticia y 2,092 resultaron afectados en los últimos cinco años, siendo el 2009 y 2011 los años en los cuales se registró mayor número de muertes, mientras que el 2007 y el 2011 contabilizó más lesionados.
De acuerdo a datos ofrecidos por el Centro de Operaciones de Emergencias (COE), durante el 2007, 32 personas murieron y 525 quedaron heridas. Asimismo, en el 2008, el número de fallecidos fue de 31 y 412 lastimados. Sin embargo, para el 2009, aunque las recomendaciones y los avisos de las entidades de auxilio no cesaron, el feriado dejó 57 muertos y 348 individuos que requirieron servicios médicos.
Para igual temporada, pero en el 2010, 32 personas sucumbieron y 107 sufrieron algunas lesiones. En el 2011, otra vez se dispararon los casos fatales, al registrarse 58 muertos y 700 resultaron laceradas.
Lamentablemente, la mayoría de las víctimas de Semana Santa se debe al desborde de vacacionistas que recorren sin control las vías y carreteras del país, violan la Ley de Tránsito, ingieren debidas alcohólicas o utilizan playas y balnearios clausurados, además de la imprudencia de los motoristas en las calles.
Según estimaciones del COE, aproximadamente 2.1 millones de personas viajan a sus pueblos de origen y a zonas turísticas del país durante los siete días de la Semana Mayor, pero más del 70% lo hace desde el jueves hasta el domingo.
Otros datos indican que la mayor cantidad de los casos trágicos se registran en el Distrito Nacional y las provincias de Santo Domingo, La Vega, Monseñor Nouel, Barahona, Sánchez Ramírez, El Seibo y Peravia.
Los organismos de auxilio no pierden la esperanza de reducir a su mínima expresión las muertes por las festividades de la cuaresma y evitar que personas irresponsables continúen llevando luto a los hogares dominicanos.
Con ese objetivo, el COE presentó el Plan Operativo Semana Santa 2012, el cual trae como novedad la inclusión de bici-ambulancias, donde socorristas capacitados podrán llegar con gran rapidez hasta donde se encuentra el accidentado.
Además, el COE presentó un pliego de recomendaciones y medidas a tomar con el fin de salvar vidas, ya que su meta es cero muertes en la Semana Mayor.
Ojalá que en esta ocasión los dominicanos muestren un nivel de madurez y puedan recordar estos días santos con la satisfacción de la unión familiar y la reflexión espiritual que tanto requieren estos tiempos.
En cinco años, 210 fallecidos en Semana Santa
LA VOZ DE LOS QUE NO LA TIENEN ||
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