Moscú.- El Canal Nacional de Toda Belarús (ONT) confirmó este domingo la ejecución de Dmtitri Konavolov y Vladislav Kavaliov, condenados a la pena máxima, tras ejecutar aquí un atentado con saldo 15 muertos y más de 300 heridos.
La decisión sobre la condena a muerte de los autores de los ataques la tomó el Tribunal Supremo belaruso, al tener en cuenta la gravedad del delito cometido por los condenados, señaló ONT, un canal creado en 2002 por un decreto del mandatario Alexander Lukashenko.
Medios de prensa recuerdan esta jornada la demora de Occidente en condenar el acto terrorista, mientras algunas capitales ignoraron el hecho o de inmediato ofrecieron versiones tergiversadas sobre su supuesta vinculación con asuntos de política interna.
La seguridad belarusa apenas demoró tres jornadas para dar con el paradero de Kovaliov y Konovalov, quien colocó un maletín con el artefacto dinamitero en la céntrica estación Oktiaberskaya que conecta con otras arterias del subterráneo de esta urbe.
Las cámaras siguieron a Konovalov cuando abandonaba el banquillo donde depositó la bomba, cómo se desplazaba por la escalera eléctrica y desde allí manipulaba algo en el bolsillo, que resultó ser el mecanismo detonador a distancia, afirmó entonces la policía.
De acuerdo con las mismas fuentes, el ejecutado en su momento confesó, además, haber perpetrado otro atentado, el 3 de julio de 2008, en el Día de la Independencia, con saldo de unos 50 heridos, y en 2005, en la oriental ciudad de Vitebsk.
En las acciones Kanavalov contó con el apoyo de Kavaliov, indicaron medios de prensa locales.
