Aunque los cables de Wikileaks publicados por los diarios españoles Público y El País apuntaron que a Hugo Chávez le quedaba entre un año y dos de vida, la operación para extirpar una «lesión pélvica» en la misma zona donde le eliminaron un tumor canceroso anteriormente, tuvo resultados satisfactorios, según el parte médico e informes que valoran al mandatario “en buena condición física».
El presidente Chávez fue operado en Cuba el pasado lunes por tercera ocasión desde junio del año pasado. Elías Jaua, vicepresidente ejecutivo venezolano, aseguró que «se realizó la extracción total de la lesión pélvica diagnosticada, extirpándose, además, el tejido circundante a la lesión», y que «no hubo complicaciones relacionadas con los órganos locales».
El mandatario arribó a Cuba el pasado sábado 25 de febrero, para ser intervenido dos días después.
Una vez conocidos los resultados, el presidente de la Asamblea Nacional (AN), Diosdado Cabello, comentó la noticia a través de su cuenta en la red social Twitter @dcabellor: «Las dos caras del País, los que quieren Patria contentos por la salud de Chávez, los vende patria amargados porque salió bien de la operación».
La noticia también tuvo eco en Twitter, donde se creó la etiqueta #ChávezEnBuenaCondiciónFísica, a la vez que la televisión estatal difundió mensajes de solidaridad hacia el presidente y entrevistas a funcionarios sobre el tema.
Mientras tanto, la oposición ha mantenido silencio después de conocerse el informe oficial sobre el presidente.
Gobierno norteamericano
El Gobierno de Estados Unidos deseó una «rápida recuperación» al presidente de Venezuela: «La salud de Chávez es un asunto privado, pero obviamente le deseamos una recuperación rápida», dijo a Efe una fuente del Departamento de Estado, que pidió permanecer en el anonimato.
El portavoz del Departamento de Estado de EE.UU., Mark Toner, rechazó pronunciarse la semana pasada sobre el tumor, al considerar que es «un asunto privado».
En junio de 2011, cuando se produjo la anterior operación, Toner aseguró que no tenía «ninguna razón» para pensar que la salud de Chávez estuviera «relacionada con la estabilidad» en Venezuela.
El director nacional de Inteligencia de Estados Unidos, James Clapper, indicó a finales de enero en un testimonio escrito ante el Senado que «todavía hay dudas» de que Chávez estuviera curado de su cáncer.
Clapper añadió que «no hay otro líder (en Venezuela) que pueda igualar su carisma, fuerza de personalidad o habilidad para manipular la política en caso de que no vuelva a ser candidato de nuevo”. EFE
