Autoridades educativas dominicanas y extranjeras coincidieron en resaltar la deficiencia del sistema de enseñanza en el país, lo cual se refleja en los resultados obtenidos por los estudiantes al momento de tomar exámenes internacionales de conocimientos para ingresar a cualquier universidad del extranjero.
La consideraciones surgieron tras la culminación de la mesa redonda: “Calidad y medición de la educación: estudio de los exámenes PISA”, realizada en la Fundación Global Democracia y Desarrollo (Funglode), bajo el nombre: «Semana de la Educación Superior».
En ese sentido, el director del Centro de Medición de la Pontificia Universidad Católica de Chile, Jorge Manzi, calificó el régimen educativo dominicano como muy débil; sin embargo, aclaró que se nota la preocupación de las autoridades competentes por mejorarlo y adoptar nuevos métodos que sean más eficientes.
“República Dominicana es una nación que está consciente de su debilidad y de la importancia de un aprendizaje de calidad, que mejore el futuro de sus ciudadanos”, subrayó Manzi.
El catedrático chileno sostuvo que el principal problema de los países latinoamericanos es que sus gobiernos dedican muy poco del presupuesto nacional a un área bastante costosa y sensible como es la educación.
Asimismo, entiende que otro inconveniente es que los mandatarios pretenden cambiarlo todo cada vez que hay traspaso de poder y se olvidan que las deficiencias educativas se solucionan a largo plazo.
“Se necesita una política educacional con acuerdo transgeneracional, además consecuente del esfuerzo y valor de una enseñanza eficiente y una sociedad que presione para lograrlo”, concluyó el director del Centro de Medición de la Pontificia Universidad Católica de Chile.
Presidente de la República
De igual forma, el presidente Leonel Fernández considera que los estudiantes dominicanos puedan ser adiestrados para tomar las pruebas de ingreso en las universidades del extranjero, lo que garantizaría su admisión.
El Jefe de Estado propuso la creación de un banco de exámenes modelo, dirigido a profesores y estudiantes para que puedan aplicar sus conocimientos.
Precisó que en el caso del Informe del Programa Internacional para la Evaluación de Estudiantes (PISA por sus siglas en inglés), lo que se procura medir no es el conocimiento, sino la aplicación de éste a la solución de problemas.
“Cuando nuestros estudiantes van por primera vez a someterse al tipo de prueba PISA, no dominan la lógica, la estructura y la narrativa de ese tipo de examen, por tanto es crónica de una muerte anunciada. Se sabe que no la van a pasar”, indicó el mandatario.
Ministras opinan
Para la ministra de Educación Superior, Ciencia y Tecnología, Ligia Amada Melo de Cardona, la ganancia que genera este tipo de evento es a largo plazo, porque representa un punto de reflexión, donde se analiza por qué el país queda tan mal parado en pruebas internacionales, si es que no tiene dominio de los contenidos, o si no conocen la metodología de ese tipo de examen.
Especificó que esa actividad busca darles ideas a los que toman decisiones a nivel educativo y a los profesores, a fin de buscar la forma de mejorar en las pruebas en el exterior.
Melo de Cardona indicó que tienen identificados los esfuerzos que se necesitan y pretenden adoptar medidas asumidas en otras naciones, las cuales han dado excelentes resultados.
De igual forma, la ministra de Educación, Josefina Pimentel, entiende que ya existen los diagnósticos necesarios para mejorar la calidad de la enseñanza y lo único que falta es coordinar y concitar esfuerzos de manera conjunta entre: el Estado, el Ministerio de Educación, docentes, la sociedad y la familia a fin de lograr que la escuela sea un lugar atractivo para los estudiantes.
Pimentel espera también que la inversión aumente gradualmente a medida que el Estado reciba los recursos que le permitan hacerlo: “Como país, situándonos en un horizonte de futuro, estamos bien posicionados siempre y cuando se trabaje conjuntamente”, resumió la ministra.
