Suzuka, Japón, domingo, 9 de octubre. Ese es el lugar y momento en el que con casi toda seguridad Sebastian Vettel se proclamará nuevamente campeón del mundo por segundo año consecutivo. Y lo hará de forma rotunda, habiendo dominado gran parte del campeonato con un magnifico pilotaje. Ahora mismo y después del Gran Premio de Singapur al piloto alemán le falta tan sólo un punto para lograr su segundo título mundial, convirtiéndose además en el piloto más joven en lograr dos títulos.
Todo esto, que se dice muy rápido, tiene un valor muy importante y a menudo le restamos parte de esa importancia y con el tiempo se le dará la importancia que realmente tiene. O se la daremos ahora si somos justos. Y es que algunas personas tienden a menospreciar lo que está haciendo Sebastian Vettel por el simple hecho que lo está logrando con un magnifico coche. Todos sabemos lo importante que es tener un buen monoplaza para obtener resultados, pero si se es justo con lo que se ve, además de ver que Red Bull es un gran monoplaza veremos qué Sebastian Vettel está pilotando de una forma espectacular.
No hace falta que nos vayamos muy lejos para fijarnos en que es así, tan sólo tenemos que ver el vídeo de la clasificación del Gran Premio de Singapur. El piloto de Red Bull lo tiene todo en el bolsillo, le basta con sacar la calculadora y tirar, no tiene necesidad de arriesgar, sin embargo realizó una de las vueltas más espectaculares que he visto últimamente. Sobre el complicado circuito de Singapur llevó su Red Bull al límite, exprimiendo al máximo y logrando una vuelta espectacular, algo que después también hizo en carrera.
La realidad es que el Sebastian Vettel que se va a convertir en campeón en unas semanas será uno muy diferente al del año pasado, no sólo ha madurado, sino que tiene mucha más experiencia y un conocimiento del monoplaza increíble. Las comparaciones son odiosas, pero este Vettel ha recordado a uno de los mejores Schumacher.
El año que viene, ya que no hay demasiados cambios en el reglamento, probablemente continúe teniendo un muy buen monoplaza. Y ojala el resto de equipos, principalmente McLaren y Ferrari, tengan un mejor monoplaza y mayores posibilidades de plantarles cara a los pilotos de la escudería de la bebida energética. Si esto sucede, será cuando los que ahora se excusan en que tiene un muy buen coche vean y tengan que admitir que este Sebastian Vettel es uno de los mejores pilotos del mundo, y que a pesar de que tiene un espectacular monoplaza, sus victorias no se deben sólo a este.




