Originariamente, el Volkswagen Escarabajo montaba un motor bóxer de cuatro cilindros en posición trasera, más o menos la misma configuración que el Porsche 356 y el posterior 911. Con las populares furgonetas T1 pasaba más o menos lo mismo, con lo que no es de extrañar que, con los años, hayan aparecido multitud de preparaciones con motores de seis cilindros refrigerados por aire. Al parecer, las modificaciones necesarias para realizar tal conversión eran bastante asequibles. Lo que ya no es tan habitual es ver una Volkswagen T5 moderna con una configuración similar, básicamente porque la furgoneta del fabricante alemán hace años que dejó de lado los motores en posición trasera en favor de una configuración más convencional. No obstante, siempre podemos recurrir a preparadores como TH Automobile, los cuales han presentado recientemente una versión muy especial de la furgoneta de Volkswagen.
En lugar de montar los habituales motores turbo-diésel de turno, TH Automobile ha decidido que para llegar clientes VIP del aeropuerto al hotel no hay mejor opción que con un motor bóxer de seis cilindros turbo-alimentado. El donante no ha sido otro que el Porsche 996 Turbo, el cual ha cedido muy amablemente su motor bi-turbo de 3.8 litros de cilindrada para la causa. El resultado es una potencia de 480 CV y un descomunal par (para una furgoneta) de 620 Nm, lo que se traduce en una aceleración de 0 a 100 km/h en 4,9 segundos, y una velocidad máxima de 280 km/h… que teniendo en cuenta la pésima aerodinámica del modelo que nos ocupa, la verdad es que tiene su mérito.
Curiosamente, los técnicos de TH Automobile no se han limitado a sustituir un motor por otro, sino que han montado el motor del 996 Turbo en posición central-trasera, siendo fieles de esta forma a las Volkswagen T1 originales de los años 60. De hecho, y gracias a esta nueva configuración, el extravagante adinerado que quiera una de estas super-furgonetas podrá optar por el mismo sistema de tracción a las cuatro ruedas que monta el Porsche… ¡e incluso tiene la opción de convertir la T5 en un vehículo bi-motor, dejando el motor turbo-diésel de 150 CV en su posición original!
Evidentemente, las modificaciones no se han quedado únicamente en el apartado mecánico. El cambio y la electrónica también provienen de un Porsche 996 Turbo, mientras que para adaptar a la furgoneta Volkswagen a sus nuevas y sorprendentes prestaciones, se han tenido que mejorar tanto los frenos, mucho más potentes y de mayor tamaño para la ocasión, como la suspensión, el sistema de escape o las llantas. De hecho, ¡hasta el volante o los relojes indicadores han sido heredados de un 911!
Como no podía ser de otra forma, y tratándose de un vehículo donde la comodidad de los ocupantes tiene la misma importancia que las prestaciones que ofrece, el equipamiento interior está a la altura del nuevo propulsor que esconde bajo el capó: equipo multimedia firmado por Kenwood, conectores para iPad, reproductor de DVD con pantallas LCD a juego, embellecedores de madera, tejidos más exclusivos, faros bi-xenon, etc. ¿El objetivo? Que no falte absolutamente de nada. Desgraciadamente, y como me imagino que os debéis imaginar, todo ésto tiene un coste, el cual, como mínimo, ronda los 145.000€, furgoneta original a parte. Si optamos por la variante pick-up el precio sube todavía más. ¿Demasiado? Tratándose de una furgoneta, quizás. Yo por esa cantidad, y partiendo de que el dinero no es un problema, antes me decanto por un Audi RS6 Avant o un Porsche Cayenne Turbo. Aunque como dicen, para gustos, los colores.
