Washington.- Mantenerse en un alto estatus social acarrea un fuerte estrés y presión psicológica, hallazgo difundido en la revista Science basado en un estudio con babuinos.
Investigadores de la Universidad de Princenton, recogieron y analizaron muestras de heces fecales de esos primates en Amboseli, Kenia, y observaron niveles más altos de las hormonas del estrés, glucorticoides y tetosterona entre los varones alfa.
Hasta ahora se pensaba que los beneficios de encontrarse en los niveles más altos de jefatura como un mejor acceso a las parejas y a los alimentos superaban a los perjuicios que representa la competencia de otros machos.
Sin embargo, los investigadores observaron que el elevado estrés tiene efectos a largo plazo en la salud y el bienestar de los machos alfa.
Aunque los babuinos son especies de primates que no tienen un parentesco estrecho con los seres humanos viven en sociedades organizadas, por lo cual los resultados de esta pesquisa pueden extrapolarse a las personas.
«Una conclusión importante de nuestro estudio es que para algunos animales, y posiblemente también para los humanos, ocupar la posición más alta en una sociedad implica costes y beneficios únicos, que pueden persistir tanto cuando el orden social se mantiene estable como cuando experimenta cambios», señaló el autor principal del estudio, Laurence Gesquiere.
El científico trabaja para el Laboratorio de Robert Altman, del Departamento de Biología y Ecología Evolutiva, que ha investigado a los babuinos de Amboseli durante 40 años.
Los datos obtenidos en este trabajo son entre cinco y 10 veces más amplios que los logrados en investigaciones previas con primates.
Otra de las coautoras del estudio, Susan Alberts, bióloga de la Universidad de Duke, señaló que los niveles de estrés observados no pertenecen a machos alfa específicos, reflejan los efectos a largo plazo de preservar la jefatura a toda costa.