Kabul, (PL).- Bombardeos de la Organización del Tratado del Atlántico del Norte (OTAN) provocan al menos la muerte de seis civiles en la provincia afgana de Jost, según reportes conocidos en esta capital.
Fuentes de esa fuerza ocupante dijeron que los muertos eran insurgentes pero un comunicado de éstos desmintió la afirmación y denunció que en los primeros seis meses del año la cifra de víctimas civiles sobrepasa las mil 400.
Mientras, la misión de Naciones Unidas en Afganistán (Unama), afirmó que, según sus datos, la cifra de civiles muertos es de mil 462, superior en un 15 por ciento al 2010.
La información no ofreció más detalles al respecto aunque el representante de la Unama, Staffan de Mistura, dijo que los aumentos de víctimas fueron alarmantes en los meses de mayo y junio pasados.
A su vez, en Kabul se conoció un documento de la Cruz Roja Internacional en el cual se señalan los obstáculos para ofrecer asistencia sanitaria a la población civil ante la gran inseguridad, tanto en áreas urbanas como rurales.
«Las instalaciones sanitarias están cerradas y se carece de personal para esas labores,» afirmó el reporte.
También en esta capital, medios oficiales especificaron que los atentados con bombas durante la ceremonia fúnebre por la muerte de Ahmed Wali Karzai causaron seis muertos y más de una docena de heridos.
Wali Karzai murió tras los disparos de uno de sus escoltas, a quien la insurgencia afgana identificó como un infiltrado que cumplió «una misión de combate.»
Hermanastro del presidente Hamid Karzai, Wali era gobernador de la provincia de Kandahar y se le vinculó al tráfico de drogas y a la colaboración con la Agencia Central de Inteligencia (CIA), de Estados Unidos.