Tomasina Cabral, la primera presa política en la cárcel de la 40, Cristo Rey durante la tiranía trujillista, instó a los jóvenes del país a seguir siéndolo, pero con responsabilidad, porque son quienes tienen el deber de empoderarse y luchar por resolver los problemas que afectan a la República Dominicana y los instó a tener en cuenta que todo no se soluciona en un instante.
“Hay que tener paciencia para lograr la evolución y conseguir los fines perseguidos”, subrayó Sina Cabral en el Foro de Participación Juvenil celebrado en la Casa de Naciones Unidas frente a casi un centenar de jóvenes.
“Nosotros teníamos ideales que son los que mueven montañas. Ustedes también los tienen. Cada etapa de la historia requiere de luchas diferentes. Cuando yo veo un grupo de jóvenes como ustedes, que se capacitan y reclaman por sus derechos me siento orgullosa y les exhorto a continuar en la lucha por las libertades reales”, añadió Sina.
Más de 80 líderes de 30 organizaciones juveniles del país participaron en el taller organizado por el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) y UNICEF. Este taller forma parte del Foro de Participación Juvenil que, según los jóvenes explican es “un proceso de conocimiento colectivo cultural, histórico, político y social que nos va a ayudar a trabajar por nuestro país teniendo como referencia los paradigmas de desarrollo humano y derechos humanos”.
“Nos hemos empoderado de temas que hasta ahora desconocíamos y son necesarios para poder trabajar en el desarrollo de la nación” opina uno de las participantes.
“Es una oportunidad genuina de hacer ejercicio de nuestros derechos manejando los conocimientos necesarios para poder trabajar con nuestras comunidades” añade una joven. “La juventud es el motor que hace que todo arranque, hemos sido parte de toda la historia y debemos seguir haciendo historia”, concluye otro.
UNICEF y el PNUD en la República Dominicana son pioneros en la introducción de la perspectiva de la niñez y la juventud en los Informes Provinciales de Desarrollo Humano del PNUD. Ambas agencias consideran que los grupos sociales juveniles que han surgido en los últimos años demuestran que la sociedad civil, y en especial la juventud, está en un proceso de empoderamiento que podría repercutir en una mayor equidad y una mayor participación en las políticas públicas.