El noruego Mads Otsberg (Ford) es líder del rally de Suecia, primera cita del Mundial, tras la disputa de la primera etapa, lo que supone una sorpresa por ser un piloto privado, y lo ha hecho por delante de pilotos y vehículos oficiales.
El joven piloto aprovechó su retrasada posición de salida para lograr excelentes tiempos en los primeros tramos de la jornada gracias a unas mejores condiciones de agarre, y aunque la tanda de tramos de la tarde no fue tan buena, consiguió mantener el primer
puesto.
Por detrás quedaron el resto de favoritos. El finlandés Mikko Hirvonen (Ford) fue segundo, a 14.8 segundos del noruego, mientras que el noruego Petter Solberg (Citroen) fue tercero a casi un minuto.
Mal día tuvieron los pilotos oficiales de Citroen, los cuales quedaron muy retrasados. El francés Sebastien Ogier fue sexto y Sebastien Loeb, actual campeón mundial. noveno.
El comienzo del Mundial está deparando muchas sorpresas con el debut de la segunda generación de los coches WRC así como la nueva normativa, aunque Suecia no es la mejor prueba para tantear la posición de estos coches por tratarse de una superficie nevada y por el coto cerrado que tienen aquí los pilotos escandinavos.
Pero sí que es significativo que estén siendo los pilotos privados los que marquen el ritmo en este comienzo de rally, los que más se dejen ver en las posiciones de privilegio de los tramos mientras que los pilotos oficiales, los que tienen todo el poder en el desarrollo del vehículo, el nombre de la marca, y el mejor material, están sufriendo para quedarse en los primeros lugares.
Además, están siendo superados por los teóricos inferiores S2000 que ya corrían el año pasado.
Otsberg, de sólo 23 años, y encuadrado en el segundo equipo de Ford, marcó el mejor tiempo en los tres primeros tramos de la jornada, ayudado porque salía detrás de los oficiales. Aprovechó su oportunidad en los tres primeros tramos para llegar al parque de
asistencia con una ventaja de casi medio minuto sobre Hirvonen.
Después se mantuvo rápido, sin arriesgar tanto como por la mañana, y aunque vio cómo Hirvonen se le acercó, consiguió ampliar distancias con el resto.