Iquique (Chile).- El español Carlos Sainz (Volkswagen) hizo una valoración positiva de la tercera plaza conseguida hoy en la quinta etapa del Dakar, pese a un par de inconvenientes que le hicieron perder tiempo.
El madrileño empezó abriendo pista a buen ritmo, pero sobre el kilómetro 100 de la especial llegó el primer contratiempo, en un punto que en el libro de ruta no quedaba muy claro.
"Nos fuimos a la izquierda y a los 3 o 4 kilómetros vimos que no era por allí. Decidimos cortar para intentar retomar la ruta buena y nos salió bien de milagro, porque había unos agujeros tremendos", explicó Sainz.
En ese momento el Volkswagen de Sainz se encontró con el BMW del galo Stéphane Peterhansel, a quien un centenar de kilómetros más adelante consiguió adelantar para seguir como un rayo por la zona de dunas del final de etapa.
Pero a unos ocho kilómetros del final se topó con un motorista que estaba detenido en la cresta de una duna. Sainz frenó demasiado y se quedó varado en la arena.
"Frené demasiado y me quedé justo arriba. Perdí un par de minutos por lo menos, es una pena porque veníamos bastante bien y habíamos recuperado", dijo el piloto.
Su copiloto, Lucas Cruz, bajó del automóvil para amontonar arena en las ruedas traseras y poder salir del atasco y pudo seguir en marcha.
Sainz destacó que sigue líder en la general un día más, y dijo que este viernes tratará de recuperar los minutos perdidos durante esta jornada. EFE