Se apresta a tomar parte del Dakar Argentina – Chile 2011, en la que será su quinta participación en esta tan especial prueba. Compitió en las dos últimas ediciones que se disputaron en África y en las dos primeras desarrolladas en Sudamérica. En esta oportunidad integra el equipo oficial de la marca francesa Sherco, donde tendrá como compañero de equipo a David Casteu, el actual campeón mundial de rally raid. Va a encarar esta competencia en la plenitud de sus condiciones.
NELSON VICENTE
-Una nueva edición del Dakar, un nuevo desafío. El año pasado pudo llegar al final pero sufriendo mucho.
-Sí. Diez días antes del comienzo de la carrera me lastimé entrenando y largué el Dakar con la rótula y el menisco rotos. Tuve que aguantarme así toda la carrera. Al comienzo pensaba que no iba a poder llegar, pero por suerte pude terminar aunque no en la posición que hubiera querido.
-¿Ese fue el Dakar más duro y difícil que tuvo que afrontar?
-Sí, por el dolor de la rodilla, que fue el más duro, pero técnicamente también fue complicada. Pero lo peor fue por mi rodilla. Diariamente se me hinchaba y tenían que sacarme líquido.
-Pero para este año llega preparado en perfectas condiciones.
-Estoy perfecto. No he tocado la moto desde el 2 de diciembre. Estoy andando en bicicleta y nadando, pero nada de moto.
-¿Eso es parte de su entrenamiento? ¿Deja la moto para no llegar cansado a la carrera?
-Exactamente. El año pasado hubo un campeonato de enduro acá y la última fecha fue en diciembre y ahí cometí el error, pero la verdad es que no hay que andar mucho.
-¿Lo ideal es llegar a la largada con "hambre" de subirse a la moto?
-Exactamente. Ahora tengo unas ganas locas de andar. Lo ideal es no llegar cansado, porque cuando van tres o cuatro días ya estás saturado.
-¿Cómo ve el diagrama del rally para este año?
-Creo que es bastante sencillo hasta el día del descanso. Incluso la primera etapa es idéntica a la del año pasado. No va a ser nada del otro mundo hasta el día del descanso en Chile. A partir de ese momento va a ser terrible, un verdadero infierno hasta el penúltimo día que incluso tiene una prueba especial de más de 500 kilómetros. Va a ser bastante complicado.
-Para usted, ¿lo más trascendente de esta edición es ser piloto oficial Sherco?
-Obviamente. Soy piloto oficial y tengo que apoyar a mi compañero de equipo David Casteu para ganar el Dakar. Sabemos que no es fácil, hay mucha competencia, pero pienso que él está pronto para ganar. Él viene de ser campeón mundial este año.
-Usted tiene la satisfacción de haber sido elegido por David para ser su "mochilero".
-Sí, es un honor. El mismo David fue mochilero en su momento, al igual que Marc Coma y Ciryl Desprès, por ejemplo.
-¿En qué consiste eso?
-El mochilero es el segundo piloto del equipo, soy el apoyo directo en carrera para David. Yo tengo que estar lo más cerca posible de él, si él va entre los primeros yo tengo que estar entre los 15 o 20 primeros. Si él rompe su rueda, yo tengo que darle la mía y yo tratar de seguir en camino con la rueda rota, sin esperar al camión de asistencia. Si se rompe algo tengo que ayudar a repararlo para que él no pierda tiempo.
-¿Puede entregarle cualquier elemento de su moto?
-Sí, todo menos el cuadro. Motor, ruedas, suspensión, casi todo menos el cuadro. Reitero, para mí es un gran honor ir de mochilero del campeón del mundo. Él es mi amigo y le dio su opinión al equipo, pero después fue decisión propia de la marca elegirme a mí.
-¿Es su primera oportunidad de lograr una gran figuración en el Dakar?
-Exactamente. Yo voy a disponer de una moto en igualdad de condiciones que la de él. Voy a contar con cuatro motores nuevos, cuatro juegos de suspensión, etc. Eso es una gran ventaja con el apoyo de un equipo oficial detrás.
-¿La única exigencia es que usted siempre tiene que ir detrás de Casteu en carrera?
-Sí, pero eso no va a impedirme poder ganar una etapa yendo atrás de él. Por ejemplo, hace dos años David Casteu era mochilero y ganó cuatro etapas del Dakar y terminó quinto.
-¿Dónde se siente más cómodo? ¿En los tramos de montaña o en los de arena?
-En los de arena, obviamente, todos los días. Eso es un poco mi tristeza. En África teníamos 2.500 kilómetros de arena y acá tenemos un máximo de 1.000 kilómetros.
-¿No le alcanza con el desierto de Atacama o las zonas polvorientas de Fiambalá?
-No, me gustaría que hubiera más aún. La arena me divierte mucho. Yo disfruto mucho. Distinto es Fiambalá, es más duro, donde están los famosos guadales, es ese polvo suelto que es muy complicado. Las etapas por el desierto son un placer para mí.
-¿Cuáles son sus expectativas para el rally?
-No tengo pretensiones específicas. No puedo decir qué resultado voy a buscar. Sí que tengo que tratar de estar lo más rápido y cerca posible atrás de David y que, obviamente, no quiero volver a estar en el puesto 32 otra vez. Voy a tratar de estar lo más adelante posible en todas las etapas, tengo una excelente moto, estoy en muy buena condición física, este año competí mucho a nivel internacional, estoy muy positivo mentalmente y tengo una gran paz antes de la batalla. Los otros años llegaba con un stress enorme por tener que preparar todo yo mismo y ahora estoy tan tranquilo que me permite concentrarme completamente en la carrera.
-¿Luego del Dakar va a seguir siendo piloto oficial Sherco en el campeonato del mundo?
-Sí. Pero ahí en igualdad de condiciones con David, sin ser su mochilero. Espero poder completar toda la temporada y ahí sí la meta sería la de hacer podio al final del campeonato mundial. Eso sería lo ideal. Y por lo que voy a luchar.
Arena.
"Me encantan los tramos por el desierto y los disfruto mucho. Una pena que sólo sean 1.000 kilómetros por sectores de arena en esta edición".
Sherco.
"Es mi gran oportunidad de una buena figuración al contar con una moto de primer nivel, con todo el apoyo como piloto oficial de fábrica".
Mochilero.
"Significa que tengo que estar atento a todo lo que le suceda a Casteu en carrera. Pero también puedo ganar etapas y pelear para estar adelante".