La empresa El Prado Grand Hotel sometió este jueves ante la justicia dominicana a uno de los imputados en el caso Marbella, a quien acusa de cometer estafa y abuso de confianza en su perjuicio.
La querella fue interpuesta contra Tomás Olivo López, representante de las compañías GGC Inversiones Inmobiliarias S.A y Comercial de Galería S.A.
El fundamento de la instancia establece que Olivo López -vinculado a Malbella , María José Olivo López, María Dolores Olivo Sánchez, Sonia Raquel Olivo Sánchez y Fulgencio Tomás Olivo Sánchez compraron una propiedad a los demandantes, sobre la cual pesaba un embargo inmobiliario que le había trabado una entidad bancaria por una deuda.
Según la acusación, supuestamente los vendedores les confiaron a los compradores que con el dinero que tenían que entregarle, lo utilizaran para saldar la deuda y que luego le entregaran el dinero restante.
Pero, Tomás Olivo López utilizó el dinero para comprar a su nombre dicha deuda y los derechos de litigios en violación a la confianza depositada en él, con el gravamen que se revocó como acreedor de dicha propiedad.
Con esta acción el demandado buscaba adjudicarse la propiedad en venta de pública subasta, para no sentirse con obligación de pagar el balance restante a los vendedores.
La Procuradora Fiscal Adjunta Nancy Abreu, de la Unidad de Atención Temprana de la Fiscalía del Distrito Nacional, archivó el expediente, pero el Cuarto Juzgado de la Instrucción revocó esa decisión.
El Prado Grand Hotel está representada por los abogados Ingrid Hidalgo y José Núñez Cáceres. Mientras la defensa de la parte demandada está representada por Juan Antonio Delgado.
