La defensa de José Luis Montas Vargas (El Duro Motor), uno de los imputados en el caso Paya, pidió este lunes su descargo a los jueces del Tercer Tribunal Colegiado del Distrito Nacional, porque no existen pruebas sobre su participación en los hechos que le atribuyen.
También solicitó que declaren inadmisible las pruebas presentadas por el Ministerio Público en su contra.
El Ministerio Público pidió en sus conclusiones, que Montas Vargas sea condenado a una pena de reclusión mayor de 30 años de prisión, así como el decomiso de todos los bienes incautados.
Marino Félix explicó que originalmente habían cuatro testimonios en contra Montás Vargas, que fueron retenido por el juez de la Instrucción, y que sólo se escuchó uno porque el Ministerio Público renunció a los otros tres.
De estos testigos, la Fiscalía sólo pidió que se escuchara a Robert Peña Valdez, ya que era un testimonio interesado para no ser incluido en el caso.
Peña Valdez, es el hermano del ex coronel de la Marina de Guerra, Manuel Peña Figuereo, uno de los imputados, quien supuestamente participó en la reunión donde se tramó el asesinato de los siete colombianos y el tumbe de los 1,300 kilos de cocaína.
Durante el juicio, Peña Valdez explicó que él no había sido incluido en el expediente porque hizo una negociación con la Fiscalía para testificar en contra de los imputados a cambio de que lo dejaran fuera del expediente.
Al motivar sus alegatos de defensa, el doctor Félix sostuvo que la evidencia ofrecida por éste testigo no incrimina a Montas Vargas, porque sólo señala que participó en una reunión, pero aclaró que no escucho sobre matar a nadie, ni vio drogas ni armas de fuego.
Para desacreditar las declaraciones de Peña Valdez en contra de Montas Vargas, el doctor Félix observó a los jueces que éste dijo que acompañó a su defendido desde Santo Domingo a Baní y más sin embargo para identificarlo debieron presentarles fotos, algo que a su juicio es inexplicable luego de una persona compartir varias horas con otras.
Para Félix este es un testigo “mendas”, que mintió completamente para ser favorecido por la Fiscalía.
En el caso de Montás Vargas, la Fiscalía renunció al testimonio de Abel Damiron Soto, que originalmente había sido puesto como imputado, y lo rechazaron porque el Ministerio Público sabía que iba a decir que escribió el nombre y número de José Luis Montas en una libreta obligado para sacarlo del proceso.
Félix concluyó su alegato pidiendo la absolución de Montás Vargas, porque no existen pruebas de su participación en ningún hecho, puesto que así lo demuestra la declaración del único testigo presentado en su contra.
Explicó que nunca le han encontrado nada relativo al caso Paya, como armas, de las que se dice utilizaron en la matanza, ni drogas, ni estuvo en la casa de los extranjeros asesinados.
Sobre sus bienes, explicó que provienen de su empleo en la Cervecería Nacional Dominicana, así como que era propietario de cinco minibuses que operaban en la ruta Santo Domingo-Elías Piña, y propietario de las discotecas El Túnel y Umbrella, en la capital.