Chile.- La mayor parte de los mineros atrapados desde hace dos meses en las entrañas de Chile volvió el miércoles a ver la luz del sol y a abrazar a sus familiares, en un emotivo rescate que concluiría esta noche ganando su lugar en la historia.
Entre gritos de felicidad, aplausos y festejos, 25 de los 33 mineros que estuvieron 69 días en las fauces de la mina San José, en el Desierto de Atacama, emergieron a la superficie en una cápsula con los colores patrios de Chile, que fue izada por un estrecho y caluroso túnel de 622 metros de roca sólida.
En uno de los mayores hitos de supervivencia bajo tierra, los mineros salían uno por uno del yacimiento de cobre y oro tras un derrumbe a principios de agosto que en un inicio se pensaba los había matado.
"Nacimos todos de nuevo. El corazón se me salía", comentó Yessenia Segovia, al ver el ascenso de su hermano Víctor, que fue quien escribió decenas de páginas dentro de la mina con la historia de la tragedia.
Enfundado en un traje especial para enfrentar la abrupta diferencia térmica entre la mina y la superficie y lentes oscuros para protegerlos del sol, uno de los últimos en ser extraído fue Carlos Bugueño, de 27 años.
"Bienvenido de vuelta a la vida", le dijo el presidente chileno, Sebastián Piñera, estrechándolo en sus brazos.
Los mineros eran trasladados por procedimiento a un hospital móvil en el campamento y luego a un centro médico en la vecina ciudad de Copiapó, aunque hasta ahora todos mostraban relativa buena salud.
Solamente siete estaban en una unidad de cuidados especiales pese a que no eran casos serios, dijo a periodistas el ministro de Salud, Jaime Mañalich.
El maratónico rescate, que es seguido en vivo por cadenas de todo el mundo y mantuvo en vilo a millones de personas desde que comenzó en la medianoche del martes, podría concluir esta misma noche, según autoridades.
"Estamos avanzando a un ritmo de 40 minutos por cada rescate", dijo un optimista Piñera. "Tal vez el rescate va a terminar antes de lo que esperábamos y puede que termine hoy día, 13 del 10 del 10, que suma 33", agregó.
Otros creen que el rescate se prolongaría hasta el jueves. Los rescatistas prometieron no parar hasta sacar al último de los trabajadores del interior de la mina.
Pero poco a poco el campamento se iba despoblando, mientras los familiares de los mineros ya rescatados enfilaban para sus casas. Algunos periodistas también empacaban sus cámaras.