El dominicano José Guillén pasó de no ser querido por un equipo en el sótano de la Liga Americana a otro de la Liga Nacional que está en la pelea por los playoffs, y no puede ocultar su alegría.
El jardinero derecho dominicano se incorporó el sábado a los Gigantes de San Francisco, que lo adquirieron el viernes de los Reales de Kansas City, a cambio de dinero en efectivo y un jugador cuyo nombre será anunciado en fecha posterior.
"Me gusta ganar", dijo Guillén. "Soy un tipo apasionado y adoro triunfar, odio perder. Esta es una gran oportunidad y estoy muy motivado. Soy la clase de jugador al que le gusta la atmósfera de playoffs y ganar".
Guillén llega a unos Gigantes que están tres juegos y medio detrás de los Padres de San Diego en la pelea por el banderín de la División Oeste de la Liga Nacional.
San Francisco ocupa el primer lugar como equipo con opción para clasificarse a la postemporada como comodín. En contraste, los Reales, que se deshicieron de Guillén, languidecen en el sótano de la División Central de la Liga Americana.
Los Gigantes trajeron a Guillén para reforzar la parte central de la alineación con vistas a la postemporada. El caribeño ostentaba promedio de bateo de .255, con 166 jonrones y 62 carreras impulsadas en su carrera antes de que los Reales lo dieran de baja el 5 de agosto.
El jugador llegó la noche del viernes a San Francisco procedente de Florida y el piloto de San Diego, Bruce Bochy, dijo que desde el sábado deberá adaptarse a su nuevo ambiente.
Bochy dijo que Guillén estará disponible en la banca en el partido del sábado contra San Diego y el domingo se estrenará en el último encuentro de la serie entre ambos equipos.
"Es duro el viaje que realizó como para ponerlo a jugar de inmediato frente a un lanzador derecho difícil", dijo Bochy. "Queríamos darle un día para que se adaptara, para que conozca el parque, que comience a atrapar algunas pelotas. Lo tendré disponible en la banca".
Para hacerle espacio a Guillén, los Gigantes enviaron al ligas menores a
Emmanuel Burriss.
Guillén ha tenido varios problemas a lo largo de su carrera y ahora jugará para su décimo equipo en Grandes Ligas desde que se volvió profesional en 1997 con Pittsburgh.
En el 2004, fue suspendido por los Angeles al expresar su malestar para el manager Mike Scioscia. Un año después fue cambiado a Washington.
En julio del 2008, Guillén tuvo una acalorada discusión con el coach de pitcheo de los Reales, Bob McClure, y sus compañeros tuvieron que separarlos.
El dominicano no espera problemas con los Gigantes.
"Soy un veterano", dijo el jugador de 34 años de edad. "Tengo que producir y aportar. Para eso me trajeron y eso es lo que haré".
"Si no produzco, no jugaré. Cuando se disputa un banderín, se intenta alinear a los mejores nueve jugadores en el campo", apuntó.
