¿Se corresponde con la realidad del boxeo mundial el título que da pie al presente análisis?
El autor del análisis responde con un firme sí…porque en realidad, el tan cacareado combate que deben protagonizar Floyd Mayweather (Jr) y Manny Pacquiao sigue en "bambalinas".
Sin embargo, aunque parezca paradójico, tarde o temprano -pero más temprano- esa pelea tiene que celebrarse.
Un detalle aparte: Este viernes, según Bob Arum, Floyd Mayweather debe decidirse. Esto es, "determinar", con un sí o un no, si peleará con Manny Pacquiao. De lo contrario, afirma Arum, "Pacquiao enfrentará a otro rival que podría ser Miguel Cotto (¿otra vez?) o Antonio Margarito".
Pero eso es "pura cháchara" de Bob Arum.
Es que la tan esperada batalla entre el estadounidense Mayweather (Jr) y Pacquiao, de Filipinas, es una necesidad.
Una necesidad para el exigente mundo del boxeo. Y, además, porque el negocio-deporte así lo reclama.
Hace ya poco más de ocho meses, cuando se daba "por segura" la pelea, el equipo de Mayweather solicitó a Pacquiao que "para que se pudiera pactar el combate el filipino tenía que someterse a exámenes de sangre".
Y no sólo eso, sino que los exámenes debía ser por lo menos una semana antes de realizarse el pleito de puños enguantados. ¡Pacquiao no aceptó la exigencia!
El estelar pugilista filipino, quien desde hace más de ocho años no sabe lo que es una derrota, decidió aceptar enfrentar al boricua Miguel Cotto.
El 14 de noviembre del pasado año, en el hotel MGM de la ciudad de Las Vegas, estado de Nevada (Estados Unidos), el filipino devastó a Cotto a quien le arrebató el cetro welter de la Organización Mundial de Boxeo (AMB).
Mientras se registraba la contundente victoria de Pacquiao, Mayweather se preparaba para contender con su paisano Shane Mosley a quien destrozó en 12 rounds.
De manera que ya, aparentemente, el escenario estaba "listo" para que Mayweather y Pacquiao, cumplidos con sus respectivos triunfos, se pusieran de "acuerdo" para firmar la millonaria pelea.
No dejarán escapar tantos millones
Todos quieren la pelea Pacquiao-Mayweather. Los apoderados y promotores de de ambos púgiles están contestes en lo siguiente: Un combate entre estos dos súper boxeadores dejará todo el dinero del mundo.
Me arriesgo a vaticinar que cuando se dé el trascendente combate, en bruto (¿?) habrá envueltos más de 200 millones de dólares.
Cada uno de los protagonistas deberá ganar entre 50 y 55 millones de dólares…¡y cuidado si alguito más!
Bob Arum, zorro del promotaje y quien maneja la parte económica de Pacquiao, trabaja para que se quiten todos los obstáculos que puedan estar en el camino de las negociaciones y que ocasionen la no celebración del pleito.
Mientras que Oscar de la Hoya, presidente y dueño de la compañía Golden Boy Promotions y quien tiene a su cargo la parte comercial de Mayweather, no dejará escapar tanto dinero.
Está bien claro que De la Hoya se pondrá de acuerdo con Bob Arum para que la pelea Pacquiao-Mayweather sea una realidad.
Más que por dejar demostrado al mundo quién es el mejor boxeador del todo el orbe (kilo por kilo) entre Pacquiao y Mayweather, el combate debe concretarse porque sus promotores quieren que ese gran negocio no se caiga.