Según una alegada lista negra, a la que se refirieron las autoridades, por encargo de José David Figueroa Agosto, faltaría por dar muerte a cinco personas, quienes habrían desobedecido los mandatos del supuesto narcotraficante boricua o porque delatarían su red de narcotráfico y sicariato.
Los cinco que faltan por matar, según la lista, incluyen a Carolina Méndez Fernández, Andrés Aybar Abud, quien decoró la residencia de Figueroa Agosto y Juana Morel Almonte (Sobeidita), prima de Sobeida Féliz Morel.
Las autoridades se reservaron los nombres de las posibles otras dos victimas, dizque por seguridad. Figueroa Agosto alegadamente ofrece US$30 mil por cada muerte, a grupos de tres sicarios por cada encargo.
En la rueda de prensa, se presentó un video de cómo mataron a Omar Lantígua, asesinado en el parqueo del supermercado Carrefour, alegadamente a matar por Figueroa Agosto, luego que se negara a obedecer una orden de que abandonara República Dominicana.
Narraron que Figueroa Agosto envió a Lantígua un chaleco salvavidas y ropa para que se fuera a Puerto Rico en una lancha rápida, a través de Samaná.
Añadieron que Lantígua le contestó a Figueroa Agosto que no saldría del país, alegando que le temía al mar y que se entregaría a las autoridades, por lo que el supuesto narcotraficante boricua lo mandó a ejecutar.
Según las autoridades que encabezaron la rueda de prensa, Figueroa Agosto le comentó a Lantígua, vía telefónica, que se cuidara, porque las cosas se estaban complicando.
Las autoridades judiciales y policiales aseguran que detrás de las ejecuciones se ocultan intereses económicos. Aclararon que hasta el momento no han encontrado ningún vínculo de miembros de los cuerpos Castrenses y Figueroa Agosto.
Las autoridades mostraron un arsenal incautado a dos de los supuestos sicarios. Había pistolas, cargadores, varios cartuchos con capsulas de diferentes calibres, chalecos antibalas, uniformes, carnet y gorras de la DNCD.
Dos maletas grandes, un maletín conteniendo armas largas, explosivos (dinamita) y dos radios de comunicaciones, ambos funcionando en la frecuencia de la Policía Nacional.
Entre las armas incautadas figura el fusil AK47, marca Noricon y la pistola marca Bersa, calibre nueva milímetros, las cuales, según las autoridades, coinciden con los casquillos recolectados en la escena del crimen de González y González y heridas a su esposa, Madeleine Bernard Peña.
Una pistola marca Block, calibre 9 milímetros con un compensador de ráfagas, que también coinciden con la que mataron a Omar Antigua Polanco, Rubén Soto Hayet, Jorge Santana, Máximo Jerónimo y demás herido en el parqueo de la repostería La Francesa.
Otra de las evidencias son reportes de llamadas telefónicas, masificación de celdas, record telefónicos de las actividades que realizaban sus usuarios en el recibimiento y envío de mensajes de textos y llamadas entrantes y salientes.