Agujero en corazón es fatal para la vida

Recibir el diagnóstico de tener un “foramen oval abierto”, agujero en el corazón, puede ser impactante para cualquier paciente, pero lo positivo es que aunque se trata de una afección que sufren muchas personas en el mundo –incluso en República Dominicana- actualmente es tratada sin cirugía con un procedimiento de mínima invasión.

En realidad es un defecto congénito, consistente en que no se cierra al nacer –como debe ocurrir- la válvula que comunica las dos cámaras del corazón y por ello muchas personas tienen el problema sin saberlo, pues en la mayoría de los casos no da síntomas.

Sobre este problema fue consultado en Santo Domingo el doctor Ramón Quesada, director de cardiología intervencionista del Instituto Cardiaco y Vascular Baptist, de Miami, quien explicó que “este problema es la causa de entre el 40% y 50% de todas las embolias, pero es un enemigo secreto porque es un defecto congénito que muy pocas personas saben que padecen. Se trata de una malformación del foramen oval, es decir la válvula que conecta las aurículas derecha e izquierda del corazón y que impide, cerrándose al nacer, que la sangre pase de una cámara a la otra”.

Cúando Ocurre?, dijo que “en un 10 por ciento de las personas la válvula no se cierra del todo, haciendo posible cierta permeabilidad. ¿Qué quiere decir esto? Que en circunstancias de intenso esfuerzo (como ejercicios exhaustivos, prácticas de buceo, hacer el amor o incluso durante un acceso fuerte de tos), la sangre que se acumula en la aurícula derecha puede pasar a la izquierda, formando un coágulo que viaja al cerebro y provoca un infarto cerebral. Esta es una de las razones más comunes de embolia en personas jóvenes”.

Quesada, quien puso el e mail international@baptisthealth.net a disposición de las personas que deseen mayor información sobre el tema, apunta que “tradicionalmente esto se ha tratado con anticoagulantes y con cirugía de corazón abierto, pero ahora se hace un procedimiento intervencionista consistente en introducir por la vena femoral un catéter con un globo en la punta hasta llegar al foramen, donde se coloca un dispositivo doble de teflón que recuerda a dos sombrillitas, y que sella el área de comunicación”.

En Baptist Health South el procedimiento es ambulatorio, toma apenas 30 minutos, aunque el paciente se queda una noche en el hospital bajo observación. Es muy sencillo y sus resultados en cuanto a posibilidades de recurrencia y de supervivencia son excelentes.

Un apunte

Por desconocimiento

La mayoría de quienes padecen el mal lo desconoce, por lo que tiende a agravarse durante la práctica de ejercicios o cuando la pareja hacen el amor, por el fluido de sangre de una aurícula a otra.

Compartir esta publicación:

WhatsApp
Facebook
X
LinkedIn
Pinterest