Nueva York.- Un juez de Nueva York descartó hoy retirar los cargos por terrorismo presentados contra el tanzano Ahmed Khalfan Ghailani, el primer preso de la base naval de Guantánamo (Cuba) en ser transferido a Estados Unidos para su enjuiciamiento, pese a la petición presentada por sus abogados.
Lewis Kaplan, juez federal de Manhattan, rechazó así la petición de la defensa del tanzano, que argumentaba que las confesiones de Ghailani se obtuvieron en interrogatorios en los que se utilizaron técnicas "equivalentes a la tortura" mientras se encontraba bajo custodia de la Agencia Central de Inteligencia (CIA).
El magistrado explicó que, en cualquier caso, durante el juicio, que se espera que comience en septiembre próximo, la Fiscalía no recurrirá a los testimonios obtenidos en los dos años en los que Ghailani, presunto guardaespaldas de Osama Bin Laden, permaneció en un centro secreto de la CIA.
Además, aseguró que el detenido podría tratar de demandar a quienes él dice que le torturaron, así como al Gobierno estadounidense por haber violado sus derechos, según argumenta, pero descartó que tenga derecho a que se retiren los cargos que pesan contra él.
Sus abogados sostienen que Ghailani fue ocultado durante dos años deliberadamente en un centro secreto en el que se le sometió a determinadas prácticas para interrogarlo y hacer de él alguien de interés para las fuerzas de inteligencia de Estados Unidos y evitar así que fuera juzgado en este país por un tribunal civil.
Ghailani, acusado de pertenecer a la red terrorista Al Qaeda -algo que él niega-, estuvo preso desde 2006 en Guantánamo por su supuesta participación en los atentados contra las embajadas estadounidenses en Tanzania y Kenia en 1998, en los que murieron 224 personas.
Previamente, el acusado permaneció en uno de los llamados "lugares negros", creados por orden del ex presidente George W. Bush menos de una semana después de los atentados del 11 de septiembre de 2001.
La defensa cuenta con un informe de la Cruz Roja que denuncia la tortura de detenidos, entre ellos de Ghailani, en centros controlados por la CIA con "métodos como privación del sueño, nudismo prolongado, bombardeo de ruido y luz, inmersión en agua fría, la obligación de permanecer de pie durante mucho tiempo, palizas y sofocación con agua".
Para el Pentágono, Ghailani es uno de los más valiosos presos de Guantánamo y cuatro de sus presuntos cómplices ya cumplen cadena perpetua en la prisión de máxima seguridad de Florence (Colorado, EE.UU.).
El traslado del tanzano a territorio estadounidense fue decidido por un comité creado por el presidente estadounidense, Barack Obama, tras llegar a la Casa Blanca para revisar los casos de los cerca de 240 detenidos que permanecían en Guantánamo y decidir a dónde llevarlos, un paso en su intención de cerrar Guantánamo.
En 2007, Ghailani confesó su implicación en el atentado de Tanzania, pidió disculpas por haber suministrado equipamiento a los terroristas, y defendió que no sabía que iban a ser utilizados en el ataque a la embajada estadounidense de ese país.
El tanzano fue capturado en julio de 2004 en Pakistán y encerrado en una prisión secreta de la CIA hasta 2006, cuando fue trasladado a Guantánamo. EFE